El Frigoríficos del Morrazo apura las horas para afrontar una nueva final en su lucha por la permanencia, mañana ante el Villa de Aranda. La escuadra que dirige Víctor García, "Pillo", busca una victoria que le permita abandonar su delicada situación clasificatoria y, a la vez, adquirir el refuerzo moral necesario para poder cerrar la primera vuelta en una mejor posición. El técnico de los cangueses asume que el de mañana "es un partido vital para nosotros. Ganar es imprescindible" y asegura ver a la plantilla "concienciada de hacer un buen partido". Para Pillo el equipo "está con ganas de engatillar dos buenos resultados seguidos y de quitarse la mochila de encima. El día del Benidorm fue la final de octubre y ante el Aranda será la final del mes de noviembre".

Pillo asume que el Cangas deberá dar el do de pecho en esta recta final de año para poder cerrar la primera vuelta en unas condiciones aceptables. El calendario de la segunda es, sobre el papel, más favorable para los intereses del equipo de O Morrazo, pero antes hay que llegar a ella sin arrastrar un excesivo lastre. "En la segunda vuelta tendremos los encuentros de nuestra liga en O Gatañal, pero no podemos ir a ella con muy pocos puntos. Hay que sumar como sea, y eso significa que mañana hay que ganar sí o sí, y que luego necesitaremos tres o cuatro puntos más", razona el preparador pontevedrés.

Cálculos similares

Los cálculos de Pillo son similares a los que ya expresó el presidente de la entidad, Manuel Camiña, hace dos días en este periódico. Con los puntos de Aranda se alcanzarían los 6 y luego habría que intentar puntuar en al menos dos de los tres encuentros que restan para acabar el año, Sinfín, Ademar y Bidasoa. De este modo, se podría cerrar la primera vuelta con 9-10 puntos, lo que dejaría a los cangueses en una aceptable disposición para plantear batalla en la segunda vuelta de la Liga.

La imagen ofrecida en Logroño ante el Naturhouse, a pesar de la derrota, supone un refuerzo anímico después del varapalo sufrido ante el Atlético Valladolid, que el entrenador de los de O Morrazo califica de "accidente". Pillo admite que "fue un mazazo después de haber ganado al Benidorm, pero lo cierto es que la trayectoria del equipo estaba siendo bastante positiva salvo ese borrón". Con todo, el técnico apunta la dificultad de puntuar lejos de O Gatañal. "En esta Liga es complicado sacar algo positivo fuera de casa. De hecho el Valladolid se estrenó el pasado fin de semana y el Benidorm también. Todos los equipos están enganchados a lo que hacen en su casa", señala.

El Frigoríficos tendrá para este partido a su plantilla prácticamente al completo, incluyendo a los jugadores vinculados desde el Luceros, toda vez que el central Filip Vujovic ha abandonado la enfermería y está entrenando con normalidad. El único jugador de baja es Alberto Casares, que todavía no tiene el alta médica, por lo que, tal y como estaba previsto en un principio, no reaparecerá hasta la segunda vuelta de la competición, a partir de febrero del año próximo.