El Embutidos Lalinense Balonmán Lalín se ha situado en el ojo del huracán ante su posible ascenso directo a División de Plata. A la espera de que junta delegada de la Federación Española de Balonmano tome la decisión definitiva sobre el futuro del equipo rojinegro, el club apuesta por no realizar valoraciones precipitadas. Lo único claro en estos momentos es que la temporada se dará por finalizada, por lo que el Embutidos Lalinense, al igual que el resto del balonmano nacional, no volverá a saltar la pista. Ese será el inesperado punto y final de una campaña para enmarcar del equipo dirigido por Pablo Cacheda, líderes del grupo gallego y con un tramo final de temporada propicio que los tenía bien posicionados con miras a conseguir su objetivo de disputar el play off de ascenso a Plata.
El entrenador del Embutidos Lalinense realizó ayer una valoración positiva de su temporada, aunque lamentó no haber podido terminarla. "Que den por terminada la temporada es una mala noticia. Puede ser complicado de entender pero la temporada estaba siendo muy buena. Somos deportistas y nos gusta competir pero la situación mundial no nos ha dejado hacer nuestro trabajo. Personalmente habría preferido jugar y pelear por el ascenso en la pista", manifestó el técnico dezano.
Cacheda se refirió a la posibilidad de terminar ascendiendo directamente como primeros de grupo y sin tener que disputar la fase de ascenso. "Ahora nos toca esperar a ver lo qué pasa y la solución final que le dan a todo esto. Dicen que habrá ascensos y somos los primeros del grupo pero también estamos en una competición sin ascensos directos. Pueden pasar muchas cosas y hasta que sea oficial no podemos valorarlo. Me da pena que todo termine así después de una temporada en la que la valoración es inmejorable", manifestó.
"Es cierto que se pudo hacer mejor, porque perdimos algún partido, pero tres de ellos fueron por un gol y ante rivales directos. Es algo normal cuando estás cinco o seis equipos tan igualados arriba. Creo que el resultado final de la temporada es positivo. Todos habríamos firmado llegar a esas alturas de la temporada como líderes. Paramos cuando creo que estábamos cerca de cumplir nuestros objetivos", añadió Pablo Cacheda.
El técnico mira ahora al futuro con incertidumbre, tanto por el posible ascenso como por las incógnitas económicas y deportivas que siempre genera ese gran salto hacia arriba. En la parte que a él le toca decidir se mantiene expectante ante el escenario que se pueden encontrar a nivel deportivo, tanto en cuanto a la competición como en relación a sus propios jugadores tras un parón de competición y entrenamientos de casi dos meses y que podría extenderse todavía varios meses más.
