María Figueroa es uno de esos ejemplos claros de que si un sueño se persigue con constancia y trabajo, acaba llegando. Más tarde o más temprano, pero llega. En su caso, no puede decirse que tuviera que esperar demasiado, ya que con 18 años, la redondelana ha vivido ya su debut en la Primera División femenina de fútbol, en el partido disputado el pasado domingo, entre el Deportivo Abanca y el Levante, en la jornada 18ª, donde las herculinas perdieron por 1-3 en Abengondo. Pero, pese a la derrota, ese partido tendrá para siempre un lugar imborrable en su memoria.

La defensora pasa así a engrosar la selecta nómina de futbolistas gallegas que han tenido el privilegio de debutar en Primera tras jugar sus primeros minutos con el primer equipo del Deportivo la pasada jornada en el partido ante el Levante y, aunque las herculinas cayeron por 1-3, siempre quedará en el recuerdo de la defensa.

Figueroa llegó esta campaña al Deportivo como uno de sus refuerzos para el filial, el Deportivo B, que milita en la Primera Nacional femenina. Hasta Abegondo llegó procedente del Viajes Interrías. “Que me convocaran fue una sorpresa muy grande. Venía del B, donde lo estamos haciendo bastante bien, por cierto, y ya solo que me llevara a entrenar durante la semana con el primer equipo era todo un premio. Supongo que se debe a que se están haciendo las cosas bien en el B y que me convocara me pareció increíble e inesperado al mismo tiempo”, admite. Pero es que, además, fue titular y jugó toda la primera parte. “Fue lo más sorprendente de todo. Cuando llego al vestuario y me dicen que soy titular al principio no me lo creía. Luego asimilé que era lo que tenía que pasar ese día así que nada, a tirar para adelante y a hacer lo que sé hacer, que es jugar al fútbol”, indica.

El técnico deportivista Manu Sánchez y sus compañeras le aconsejaron antes de saltar al campo “que estuviera tranquila, que lo iba a hacer bien, que tenían confianza en mí y que si me ponía era por algo; el técnico me dijo que hiciera lo que sé hacer”. Y fue lo que hizo. “Me llevo un buen recuerdo del partido. A pesar de no pudimos llevarnos los tres puntos, para mí fue un día inolvidable y doy muchas gracias por haber tenido esta oportunidad y porque mis compañeras me lo pusieron muy fácil y estuvieron en todo momento animándome y preocupadas de que me sintiera a gusto y es algo que valoro mucho”.

Después de este gran premio, no quiere despertar. Por lo pronto ayer retomó los entrenamientos con el primer equipo de nuevo. “Supongo que si sigo así seguiremos luchando por estar ahí”, dice Figueroa, que llegó esta campaña al B con la ilusión de cumplir su sueño de llegar a Primera. “Para mí el Deportivo es un súper equipo y fichar por el Depor B ya era una gran ilusión. Lo conseguí y tener esta oportunidad es muy importante porque también fiché porque tenía esa meta para poder llegar ahí”, dice ante un sueño que ha cumplido “antes de lo que imaginaba”: “No me esperaba llegar ya, tan rápido, pero ahora hay que seguir para tener más oportunidades.

La futbolista, que puede jugar tanto de defensa central como de mediocentro, empezó jugando en el Casa Paco, en fútbol sala, y luego recaló en el Choco en edad cadete. “Empecé jugando con los chicos, hasta que fiché por el Matamá, que fue el primer equipo femenino en el que jugué”, explica. Tras “una buena campaña” en la escuadra viguesa, dio el salto al Viajes Interrías, hasta su mudanza a A Coruña. “Todo ha sido bastante rápido, la verdad”, reconoce.

“Es muy complicado llegar a Primera División. A día de hoy aquí en la máxima categoría solo está el Deportivo, de lo contrario te tendrías que ir fuera”, se lamenta, agradecida de poder “disfrutar” de la oportunidad que ya han tenido otras jugadoras del B como Eva Dios, Carlota Sánchez, Patri López , mientras que la rosaleira Sara Álvarez, ‘Muñi’, también ha subido al primer equipo. Además de su debut, Figueroa ha tenido el privilegio de jugar junto a una de las futbolistas que más admira, que es Iris Arnaiz. “Sigue siendo mi referente y tener el placer de jugar a su lado es algo muy fuerte”, reconoce.

Por ahora ha acudido solamente a la selección gallega, pero no cierra las puertas a llegar a la española algún día. “Por soñar, que no sea”, bromea. “El sueño está ahí, pero yo me planteo las cosas paso a paso. Este fin de semana he dado uno muy grande y espero poder seguir más, poco a poco, y ya veremos si más sueños se hacen realidad o no”. “Ahora toca disfrutar al máximo. Queda esta semana por delante y la siguiente meta está en poder volver a ser convocada con el Deportivo Abanca A”, anhela.