El Conservas Orbe Rubensa Porriño trabajó ayer con la convicción de que el partido de esta tarde, correspondiente a la segunda ronda de la Copa de la Reina, se llevaría a cabo sin sobresaltos. Estaba pendiente de los test de antígenos del Aula Valladolid, en alerta después de que una jugadora del Balonmano Zuazo, último rival liguero de las pucelanas, confirmara su positivo por COVID-19. Un positivo que, además, tuvo como consecuencia el aplazamiento de la eliminatoria del Atlético Guardés con el club de Baracaldo. Finalmente la Federación Española anunciaba a media tarde que los test del Aula eran negativos y que habrá partido.

Tratando de centrarse en lo meramente deportivo, el Conservas Orbe Rubensa afronta ese primer encuentro de la segunda eliminatoria de la Copa, previsto a las 20.00 horas, ante un Aula Alimentos de Valladolid que viene de vencer en la Liga al Zuazo. El equipo vallisoletano pertenece al Grupo A en la liga regular y se encuentra en la mitad de la tabla con 10 puntos. “Para mí es el equipo que seguramente mejor se ha reforzado, creo que han tocado puestos claves y que han mejorado muchísimo la plantilla”, valora el técnico Isma Martínez. “Han incorporado muchísimo talento y lanzamiento exterior con Danila y Lorena Téllez o a gente joven con proyección como Jimena o Parra”, añade.

En cuanto a la parte defensiva y ofensiva del Aula, destaca que “al final es un equipo muy reconocible que lleva muchos años jugando siempre a lo mismo. Tienen un contraataque letal y una transición fuerte”. Ante esto considera que “es un equipo muy complicado”. “El partido pasará por evitar que se sientan cómodas en la transición, por cerrar el lanzamiento exterior y no dejar jugar cómoda a Teresa”.

Martínez reconoce, además, que la situación es complicada: “Con los parones y todo es difícil llevar un ritmo de competición normal para las fechas en las que estamos”.

Por último, el partido se retransmitirá a través del canal de YouTube del Club Balonmano Porriño.