La triatleta afincada en Tomiño Iria Rodríguez Huertas debuta este próximo fin de semana en Huelva en la primera prueba de la Copa de Europa de triatlón y lo hará rodeada de la élite mundial en la distancia olímpica.

Este domingo, 24 de marzo, Iria Rodríguez se presenta ante la élite mundial del triatlón europeo, en la primera prueba de la Copa de Europa, una prueba que se disputa bajo la distancia olímpica (1.500 metros de natación, 40 kilómetros en bicicleta y 10 kilómetros de carrera a pie).

La joven triatleta, de 20 años, debutó precisamente este año en la distancia olímpica en La Habana, en la Copa de América de Triatlón el pasado mes de febrero, consiguiendo un meritorio cuarto puesto y siendo la primera europea en cruzar la línea de meta.

Iria Rodríguez es la nueva esperanza del triatlón gallego, una triatleta muy regular en las tres disciplinas, pero destacando sobre todo en el sector de la natación, una disciplina que se le da realmente bien ya desde muy pequeña, lo que le permite estar desde el principio en los puestos delanteros de cada una de las pruebas que disputa y con una carrera a pie con los mejores tiempos del panorama nacional.

La triatleta afincada en Tomiño, que todavía es sub 23, se medirá este fin de semana con las mejores triatletas españolas e internacionales en una prueba que marcará en qué punto se encuentra la gallega. Pese a que asegura que los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 le quedan todavía muy cerca, no se puede descartar ningún objetivo. El primer paso será consolidarse entre las mejores de españa en categoría absoluta y, de lograrlo, no sería osado pensar en ella como una opción para los Juegos. Todo dependerá del rendimiento de la pupila de Omar González durante esta temporada.

La triatleta está becada en el Centro de Alto Rendimiento de Pontevedra y ha intensificado sus entrenamientos en este primer año sub 23 para ella, donde ya ha empezados a sumar sus primeros puntos ITU, gracias a su cuarto puesto en La Habana. Después de Huelva, también tiene fijadas en su calendario las citas de Melilla y Quarteira, con la intención de hacerse un hueco en las competiciones internacionales a medio plazo.

De conseguir un billete olímpico, podría darse la situación de acudir a la cita de Tokio junto a su hermano, Roi Rodríguez, el palista del Kayak Tudense que también lucha por su clasificación para los Juegos de 2020.