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atletismo - XIX medio maratón gran bahía vig-bay

Una llamada a la solidaridad en la Vig-Bay

La carrera será el punto final del reto de Daniel Fernández para visibilidad el Síndrome de Usher, que padece Daniela Juste, una niña de 5 años de Gondomar

Daniel Fernández, izqda., junto a Ricardo Juste, el padre de Daniela. // M.G. Brea

Un día, a través de la prensa local, Daniel Fernández, un joven de Gondomar, conoció el caso de Daniela Juste, una niña de cinco años de Nigrán que nació con el Síndrome de Usher, una enfermedad rara y hereditaria que, a día de hoy, no posee tratamiento. Daniel se puso en contacto con sus padres y convirtió el caso de la pequeña Daniela en su reto de 2018, Reta3 por el Síndrome de Usher, cuya primera fase concluye el domingo en el Medio Maratón Gran Bahía Vig-Bay.

Su intención es la de dar visibilidad sobre esta enfermedad rara y hereditaria que causa sordera o pérdida de audición desde el nacimiento, así como el deterioro de la visión debido a una alteración del ojo denominada Retinitis Pigmentaria dando continuidad a su labor solidaria iniciada hace dos años. El año pasado hice otros tres retos a favor del Alzheimer y en 2015 hice otros tres a favor de la diabetes infantil. Todos ellos vinculando el atletismo y la bicicleta", explica.

El gondomareño inició esta labor solidaria "porque mi abuelo tenía diabetes y Alzheimer y falleció a causa de esas dos enfermedades así que decidí aunar deporte y solidaridad y poner en marcha este tipo de retos".

El domingo, en la Vig-Bay, una carrera que ya disputó hace cuatro años, finalizará la primera parte de su reto de 2018, que inició el lunes en la Illa das Esculturas. Su intención es la de cubrir siete maratones en siete días o, lo que es lo mismo, siete días completando la distancia de 42 kilómetros, para lo que el domingo disputará la Vig-Bay dos veces (ida y vuelta). El martes estuvo en A Guarda, el miércoles en Castrelos y ayer, en Playa América. Hoy correrá en Baiona y mañana, en Gondomar, para acabar el domingo en Baiona.

La Vig-Bay será un gran escaparate para su reto, ya que durante la semana ha corrido en circuitos diseñados por él mismo en una zona determinada y, a veces, en solitario. "Los recorridos los organizo yo e invito al todo el que quiera que me acompañe uno, dos, cinco o los 42 kilómetros allá donde voy a estar corriendo durante estos días", apunta. En su página de Facebook 'Reta3 por el síndrome de Usher' cuelga cada día el inicio de su prueba, así como el final cuando ya lo ha superado.

El domingo será el 'día grande' de su reto. Recorrerá 21'1 kilómetros hacia la Avenida de Samil y una vez allí se unirá a la Vig- Bay para disputar los últimos 21'1 kilómetros del reto. "Al ser en la Vig Bay tendrá más repercusión. Como me encantó la primera vez que la corrí, como me queda al lado de casa y al ser una carrera tan importante en Galicia, pues me ayudará a dar más impulso a este reto", explica. Al planificar su reto, se puso en contacto con la organización "y me apoyaron en todo, incluso me regalaron la inscripción gratuita y les estoy muy agradecido".

Habrá dos retos más, ambos en verano, uno en junio y otro en agosto. El segundo aún está por definir, pero para el tercero planea hacer una ruta uniendo las cuatro provincias de Galicia en bicicleta. "Este reto no busca recaudar dinero, sino sensibilizar y hace visible esta enfermedad", subraya.

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