El Areosa acabó con una racha negativa de cuatro derrotas consecutivas, con un punto ante un Lugo que se llevó demasiado premio al trabajo realizado durante los noventa minutos de juego.

El partido fue de claro color vigués. Los colegiales afrontaron el encuentro ejerciendo una presión intensa de medio campo hacia arriba, con lo que los lucenses tenían muchos problemas para sacar el balón jugado. Una de las recuperaciones de los jugadores del Areosa les valió para romper la igualdad inicial del marcador, al quedarse Samu delante de Julen. Óscar pudo ampliar la ventaja minutos más tarde cuando no llegó por muy poco a un balón dividido. La alegría no le duró mucho, pues cinco minutos más tarde una indecisión del guardameta vigués permitió que Jimi empatara el encuentro.

En la segunda parte el Areosa tuvo que remar contra corriente tras otra indecisión defensiva que le permitió a Isma marcar. Era un resultado que no se ajustaba a lo que estaba pasando sobre el terreno de juego, pues los únicos que apostaban por un juego ofensivo era el Areosa, que llegó a estrellar dos balones en el palo. Una clara mano de Jimi permitió que los vigueses igualaran el encuentro y se llevaran un punto muy merecido.