Cristiano Ronaldo fue sorprendido, ayer, en su yate por el departamento de Aduanas de la Agencia Tributaria mientras disfruta de sus vacaciones en la isla de Formentera.

El futbolista portugués, al regresar a su barco tras una comida familiar en un restaurante de Formentera, se vio abordado por una patrulla de agentes armados que llegaron en lancha desde un enorme barco de la Agencia Tributaria de Aduanas. Estos agentes, realizaron una inspección de la embarcación alquilada por el jugador luso, sin más importancia.

Durante la inspeccion al yate alquilado del luso, tanto el propio jugador, como su novia,su familia y sus amigos se mantuvieron en su interior, y mantuvieron la calma. De hecho, Cristiano no se levantó en ningun momento a hablar con los agentes para interesarse de que estaba ocurriendo, y fue un amigo del portugués quien presentó todos los papeles que les solicitaron. La Agencia Tributaria aclaró que se trataba de un control rutinario de embarcaciones que se realiza todos los veranos en Baleares en relación con el impuesto de matriculaciones de las empresas de Charter, y que no afecta a los usuarios.

No debemos olvidar que todo lo relacionado con Cristiano y Hacienda es noticia. El portugués está acusado de defraudar a la Agencia Tributaria entorno a 15 millones de euros entre 2011 y 2014. La Agencia Tributaria cree que la regularización que hizo el futbolista en 2014 no fue correcta y que a los 5,6 millones de euros que pagó debería haber sumado otros 15 millones.