El italiano Vincenzo Nibali (Bahrain) se impuso ayer por delante del español Mikel Landa (Sky), en la decimosexta etapa del Giro de Italia, de 222 kilómetros, entre la localidad de Rovetta y de Bormio, en la que el holandés Tom Dumoulin (Sunweb) mantuvo la "maglia" rosa de líder.
Nibali triunfó en la etapa reina del Giro del Centenario, en un intenso esprint con Landa, en una jornada en la que el colombiano Nairo Quintana (Movistar) terminó tercero, a poco de los dos primeros, y Dumoulin logró defender su "maglia rosa" a pesar de un percance intestinal.
El holandés tuvo que pararse durante un minuto a falta de unos 30 kilómetros para la meta y vio bajar su ventaja en la general de los 2.41 minutos que llevaba a Quintana tras la decimoquinta etapa a los 31 segundos.
Antes de la salida, en Rovetta, los 174 corredores se pararon para respetar un minuto de silencio en honor al motociclista Nicky Hayden, la atleta de triatlón alemana Julia Viellehner y las 22 víctimas del atentado en Manchester.
En el paso del Mortirolo se asistió a un momento de gran deportividad por parte de Omar Fraile (Dimension Data), que no disputó el paso a Luis León Sánchez (Astana) para que éste llegara primero a la cima del Mortirolo y homenajeara a su excompañero Michele Scarponi. El ciclista italiano iba a ser el capitán del equipo Astana, pero falleció trágicamente el mes pasado tras sufrir un accidente de circulación mientras entrenaba y los organizadores del Giro decidieron dedicarle el histórico Mortirolo.
La decimoséptima etapa se disputará hoy entre Tirano y Canazei, de 219 kilómetros, con un comienzo que verá a los corredores transitar por las duras subidas de Aprica y Paso del Tonale y que terminará con una bajada de un kilómetro.
