Oficio y juventud son las dos palabras de moda para este Celta. La primera es la gran asignatura pendiente de los de Berizzo tras quedarse a las puertas de la final de Copa y de ceder, al menos un punto, en su visita al Vicente Calderón en los últimos cinco minutos de partido. El preparador celeste, sin embargo, justificó ambas derrotas en la lozanía de un grupo que esta temporada acumulaba más alegrías que tristezas sobre la bocina. Los dos últimos resultados equilibran un balance que en Liga ha dado a los vigueses ocho puntos mientras que ha cedido el mismo botín en el tramo decisivo.
La campana se ha convertido en una pesadilla en menos de una semana. El desastre comenzaba en el peor escenario posible. Edgar Méndez era el verdugo. Su gol a menos de diez minutos para la conclusión empañaba de lágrimas el sueño del celtismo de estar en la cuarta final de Copa de su historia.
El Celta encajaba el golpe psicológico. Sin tiempo para los lamentos, los vigueses preparaban su despedida del Vicente Calderón ante el otro equipo que se quedó a las puertas de la final de la competición del KO, el Atlético de Madrid. Los de Berizzo cuajaron 85 minutos sensacionales, pero en la recta final sucumbieron al poderío de la "caldera" rojiblanca. El argentino optó por reforzar el centro del campo incluyendo a Marcelo Díaz por Aspas. El equipo cedió terreno. Un golazo de Carrasco en el 86´ y otro de Griezmann dos minutos después certificaron el segundo golpe psicológico para el Celta en apenas cinco días.
La derrota sufrida frente al Atlético de Madrid es prácticamente un calco a la sufrida frente al Athletic. El Celta firmó uno de sus mejores partidos de la campaña, pero al encuentro también le sobraron los minutos finales. El dudoso penalti de Roncaglia sobre Williams, que dejaba a los vigueses en inferioridad numérica, volteaba el encuentro. Aduriz neutralizaba el tanto de Aspas desde los once metros (80´). Ya en el descuento, San José desequilibraba el electrónico con un golazo similar al firmado por Carrasco.
La bocina fue esquiva con el Celta en otro compromiso liguero. Fue en la primera salida del curso, también en Madrid. El equipo vigués rozaba el empate ante el Real Madrid en el Santiago Bernabéu. Los de Berizzo sostenían sin problemas al conjunto de Zidane, pero un remate de Kroos desde fuera del área en el minuto 81 decidía el choque. El cuadro celeste se volvía de vacío tras firmar un gran encuentro ante el vigente campeón de Europa. En total, ocho puntos que se han esfumado para los pupilos de Berizzo.
Salvados por la campana
En el recuerdo está la victoria firmaba ante el Alavés en LaLiga Santander. Era la referencia de cara a la semifinal copera. Radoja era el encargado de decidir un partido ajustado, táctico frente al rocoso equipo que dirige Pellegrino. El Celta daba continuidad a un excelente inicio de año con tres puntos que le mantenían en la lucha por los puestos que permiten disputar la Europa League.
Lo ocurrido en Balaídos ante el Alavés era la confirmación de que el conjunto vigués se convertía en un especialista en partidos sobre la bocina. En su visita al Benito Villamarín arañó un punto gracias a un tanto de Facundo Roncaglia a balón parado (3-3) a cinco minutos del final mientras que las victorias comenzaron a sonreírle a los de Berizzo esta campaña en el tramo decisivo de los partidos.
La primera victoria de esta temporada fue agónica. El Celta llegaba a Balaídos tras sufrir tres derrotas seguidas y encadenar dos empates (uno de ellos en el debut europeo frente al Standard de Lieja). El equipo vigués tiró de casta. Mallo y Aspas ejercieron de líderes, de capitanes. Duje Cop neutralizaba el tanto del marinense. Sin embargo, el morracense estrenaba el casillero de triunfos transformando un penalti en el minuto 87.
La siguiente alegría en la competición doméstica llegaba pocos días después. El Celta rompía el maleficio de Cornellá con dos goles en el añadido. Giuseppe Rossi y Pione Sisto firmaban su primera diana como celestes en partido oficial. Era la segunda victoria en LaLiga Santander, la segunda que, además, llegaba sobre la bocina.
Europa
En la competición continental, el comportamiento del Celta en la recta final ha sido determinante para seguir con vida en la Europa League. La primera victoria se gestó también a escasos minutos del final. El cuadro de Eduardo Berizzo derrotaba al Panathinaikos con dos tantos de Guidetti y Daniel Wass. El sueco abría el marcador el 83 mientras que el danés sentenciaba el choque con un precioso lanzamiento de falta en el 87.
El otro punto conquistado en la recta final fue en la visita del Ajax a Balaídos. Los de Berizzo llevaban la iniciativa ante el rival de más entidad del grupo, pero estaban sufriendo a las contras. Ziyech y Younes habían adelantado a los holandeses hasta en dos ocasiones. La entrada de Fabián Orellana fue clave para salvar un punto. Gran gol del chileno que acabaría siendo clave para seguir con vida en la competición continental.
La Europa League es una garantía de duelos agónicos en Balaídos. El último celebrado en el coliseo vigués puso en serios aprietos la clasificación del Celta. El cuadro celeste comenzó bien el decisivo encuentro ante el Standard de Lieja. En los primeros minutos Guidetti se encontraba con la madera y, justo después, Aspas inauguraba el marcador. El equipo vigués fue cediendo metros. Como ante el Athletic y el Atlético. Rubén Blanco mantenía intacta la ventaja, pero las continuas acciones a balón parado acabaron por evitar el triunfo de los locales. El sueño europeo estaba contra las cuerdas por el tanto de Laifis en ese maldito minuto 81.
Copa del Rey
Mendizorroza es el cruel desenlace de los vigueses en su última aventura en la competición del KO. Es el recuerdo más cercano. Sin embargo, los celestes confirmaron su pase a los cuartos de final con un tanto sobre la bocina. Pione Sisto transformaba un libre directo que certificaba el triunfo de los celestes sobre un Valencia que ya había sido noqueado en el encuentro de ida.
El otro ´final loco´ se produjo en la siguiente eliminatoria. El Celta culminaba la gesta de apear al Real Madrid gracias al tanto de Daniel Wass a cinco minutos del final. Era el tanto de la sentencia. Lucas Vázquez dio suspense a la eliminatoria con un tanto en el 90´, pero ya no había tiempo para más. El equipo vigués se metía en las semifinales de Copa tras ganar en el Santiago Bernabeu (1-2) y sobrevivir en el encuentro de vuelta al vigente campeón de Europa (2-2).
