El Pontevedra consiguió ayer tarde su novena victoria consecutiva en su feudo con un resultado abultado gracias a su gran acierto en la segunda mitad ante un Boiro, muy competitivo en la primera parte, pero que bajó los brazos tras encajar el segundo gol. El conjunto de Luisito comenzó el encuentro muy espeso y el primer plazo fue una muestra de falta de creatividad.