Cristian Toro logró en Disburgo la plaza para participar en los Juegos Olímpicos de Río. El palista del Fluvial de Lugo la conquistó junto a Saúl Craviotto en la prueba de K-2 200 metros, en la que se impusieron con una gran autoridad. El palista de Viveiro acompañará a Teresa Portela, Óscar Carrera y Rodrigo Germade, los otros gallegos ya clasificados, en la cita de Río. En el preolímpico continental disputado en Duisburg (Alemania) no se lograron más billetes para los Juegos. Diego Romero, del Breogán de O Grove, en C-1 1.000 metros, terminó cuarto. Solo una combinación extraordinaria puede darle una plaza en la repesca. Rubén Millán y Gabriel Campo Pavón, del Kayak Tudense, finalizaron terceros en K-2 1.000 metros, mientras André Oliveira y David Fernández, del Fluvial de Lugo, fueron sextos en C-2 1.000 metros.

Cristian Toro y Saúl Craviotto confirmaron los pronósticos que les colocaban como favoritos. Demostraron un buen estado de forma en la ronda previa. En la regata decisiva no dieron opciones a sus rivales. Dominaron la competición desde la primera hasta la última palada, sin concesiones y con gran autoridad. Su victoria fue incontestable hasta el extremo de poder relajarse en los metros finales, algo poco habitual en una distancia tan corta y lograr una ventaja final de un segundo, una distancia sideral en los 200 metros.

Los dos palistas se consideraban favoritos. Pero también desvelaban que todavía tienen margen de mejora. Ahora, con la clasificación olímpica su programa de entrenamientos será más intenso. Este fin de semana participarán en la Copa del Mundo que también se disputa en Duisburg.

Para Cristian Toro será su primera presencia en unos Juegos Olímpicos. Y tendrá como compañero a un palista con experiencia. Saúl Craviotto ya conquistó dos medallas, en Pekín y en Londres. Casualmente, en Pekín junto a otro gallego, Carlos Pérez Rial, 'Perucho'.

Diego Romero afrontó el C-1 1.000 metros con fortaleza y en uno de sus mejores momentos de la temporada. El palista del Breogán de O Grove "se vació" en la final, pero solo pudo terminar cuarto. Esa posición podría darle la oportunidad de estar en los Juegos Olímpicos. En una complicada combinación, que se puede dar pero es casi imposible, le otorgaría un billete olímpico. Diego Romero desveló que "lo dí todo en esta regata. Hice lo que tenía previsto. Pero los rivales fueron más fuertes. Estuve cerca, pero no fue posible".

Gabriel Campo Pavón y Rubén Millán fueron terceros en K-2 1.000 metros y ya quedaron eliminados de la carrera olímpica. Los componentes del Kayak Tudense no pudieron superar a los húngaros, que eran los grandes favoritos, y los ucranianos, que fueron segundos. Ambos reconocieron que "luchamos hasta el final. Incluso fuimos segundos en algún momento de la regata. Lo dimos todo y estamos orgullosos por haber llegado hasta aquí". Ambos, que también participarán desde el viernes en la Copa del Mundo, señalaron que "también nos sirve de experiencia. Ahora queda trabajar. Sabemos que tenemos un margen de mejora y por eso vamos a luchar".

André Oliveira y David Fernández, del Fluvial de Lugo, fueron sextos en C-2 1.000 metros. Los dos, fuera de la lucha por los puestos olímpicos, reconocieron que "fue una regata dura y de mucho nivel. Luchamos hasta el final. Nos quedamos con buenas sensaciones. Alemania, que es una potencia, solo nos superó por un segundo". El gallego y el asturiano también destacaron el intenso trabajo que realizaron a lo largo de la temporada y no descartan volver a intentar la clasificación olímpica para Tokio.

Por lo tanto, Cristian Toro, Teresa Portela, Óscar Carrera y Rodrigo Germade, son los palistas gallegos que estarán presentes en los Juegos Olímpicos de Río.