Duelo de altura en Balaídos. Es un partido con sabor a Europa. Enfrente estará el Athletic de Bilbao, un clásico del fútbol español que esta noche disputará en el coliseo vigués su partido número cincuenta en la competición doméstica. El Celta, que quiere despedir el año a lo grande, no lo tendrá nada fácil para doblegar a un conjunto que está llamado a pelear por la cuarta plaza que ocupa en estos momentos el cuadro celeste.
El Athletic de Bilbao viene de menos a más. Los leones, único equipo que privaron al Barça de Luis Enrique de firmar el ´sextete´, buscan sumar tres puntos que le permitan meterse de lleno en la pugna por los puestos europeos. El conjunto de Valverde destaca sobre todo por su juego aéreo, siendo uno de los cuadros más destacadas en esta faceta a nivel continental. Los centros laterales y el balón parado pondrán a prueba los centímetros de un Celta que tendrá a Pablo Hernández, Cabral y Sergi Gómez como principales bazas para neutralizar a los Aduriz, San José, Etxeita y compañía.
El conjunto vasco sólo ha sumado ocho puntos lejos de San Mamés. Su rendimiento decae a domicilio, pero lo cierto es que Balaídos no se le ha dado nada mal en los últimos tiempos. Se espera a un Athletic que intente discutirle la posesión de balón al Celta, aunque los rojiblancos no tendrán ningún inconveniente para apostar por un juego más directo, explotando al máximo la altura de hombres como Raúl García o Aritz Aduriz. Además, dado el mal día que ha hecho en Vigo, el césped de Balaídos no estará en las mejores condiciones para desarrollar el fútbol asociativo por el que apuesta Eduardo "Toto" Berizzo.
El Athletic de Bilbao, sin embargo, es mucho más que un simple rival que destaca en el juego aéreo. Los leones desembarcan en Balaídos con un Aduriz que mantiene su idilio goleador de las últimas temporadas, con Iñaki Williams maduro y con la incorporación clave de Raúl García, un fichaje que incrementa el potencial por alto de los leones y que, además, le aporta llegada desde segunda línea y más recursos para dar el último pase a los hombres de ataque. La calidad de Beñat y el trabajo de San José en la medular pondrán a prueba la sala de máquinas de un Celta que podría despedir esta noche a su capitán, Augusto Fernández.
A nivel defensivo también estamos ante un mejor Athletic de Bilbao. La zaga bilbaína se ha asentado con Etxeita y Laporte como pareja de centrales y con dos laterales de recorrido como es el caso de Balenziaga y De Marcos. Las subidas de ambos son claves para explotar los centros laterales, que tendrán como destinatarios a Aduriz, Raúl García y Williams.
La gran duda del once visitante es quién ocupará la banda izquierda.Valverde, que no ha podido contar ni con Susaeta ni con Iturraspe, deberá decidir entre Merino o Muniain, recién recuperado de una lesión.
