Cadi La Seu 87

Brantlova (14), Borges (17), Pérez (10), Reves (7), Covington (12) –cinco inicial- Navarro (2), Moreno (0), Dimitrakou (13) y Castillo (12).

Celta Indepo 81

Stankeviciene (10), Jordana (19), Pina (18), Marcos (13), Sliskovic (12) –cinco inicial- Gómez (9) y Svitlica (0).

Parciales: 28-20, 25-16, 14-21 y 20-24. Árbitros: José Antonio Pagán y Juan Gabriel Carpallo. Le señalaron 18 faltas al Cadi y 20 al Celta Indepo. Sin eliminadas. Incidencias: Partido disputado en el Palau Municipal D´sports de La Seu, que registró una buena entrada.

El Celta Indepo sigue empeñado en darle emoción a la recta final del campeonato liguero, y ayer desperdició una nueva oportunidad de llegar con ventaja al duelo, que cada vez cobra más importancia, del próximo fin de semana ante el Mann Filter de Zaragoza.

El conjunto maño se jugará esta tarde ante el Rivas Ecópolis la posibilidad de llegar con ventaja el próximo sábado a As Travesas o, por el contrario, jugárselo todo a una carta ante el Celta Indepo.

Las viguesas pagaron su mal comienzo de partido, a pesar del primer triple de Egle Stankeviciene. El equipo de Miguel Méndez comenzó defendiendo bastante bien, aunque los problemas venían en ataque, con un pobre porcentaje de acierto.

Era como si el equipo no estuviera totalmente centrado, ya que los errores en ataque se fueron poco a poco transmitiendo a la faceta defensiva.

El Cadi, sin hacer demasiado, conseguía marcharse en el marcador ante un conjunto vigués que tenía muchos problemas y muy pocas soluciones, ya que tras la lesión de Pilar Valero, Miguel Méndez solamente dispone de siete jugadoras disponibles para afrontar estos complicados partidos del tramo final de la temporada.

Las cosas no mejoraron en los siguientes diez minutos de juego. El conjunto vigués volvía a tener muchísimos problemas en ataque al igual que en defensa, lo que hacía que el conjunto ilerdense se marchara en el marcador.

Cuando Miguel Méndez solicitó el primer tiempo muerto, el equipo local vencía por 41-27, lo que cada vez ponía las cosas más complicadas para conseguir una victoria que podía ser clave en la recta final del campeonato.

El técnico vigués poco pudo arreglar en ese minuto. El equipo continuaba a la deriva y el conjunto local se aprovechaba de ello para abrir todavía más las diferencias y llegar al tiempo de descanso con una ventaja de diecisiete puntos.

En el vestuario Miguel Méndez consiguió despertar a sus jugadoras. El Celta Indepo de la segunda parte no se parecía en nada al de los dos primeros cuartos, y eso permitió que el partido ganara en emoción, ya que cuando las viguesas se lo proponen puede pasar de todo.

Cambio de actitud

El Celta Indepo comenzó una presión tras canasta que sorprendió al conjunto ilerdense.

El cambio de actitud y de forma de jugar de las viguesas dio sus frutos, y mediado el tercer cuarto del encuentro el Celta Indepo había conseguido reducir la desventaja a los diez puntos y aunque era todavía una ventaja importante, por lo menos se habían metido en el partido.

El conjunto local también reaccionó haciendo ataques mucho más largos, agotando las posesiones de veinticuatro segundos y asegurando canastas que le permitían mantenerse en los diez puntos de ventaja, diferencia que reflejaba el marcador al final del tercer cuarto, 67-57.

El Celta Indepo continuó con la presión tras canasta al comienzo del último cuarto, consiguiendo bajar de los diez puntos de desventaja.

Parecía que la reacción viguesa podía llegar a buen fin, pero en los momentos claves del partido la precipitación viguesa en ataque provocó que se perdieran varios balones, 17 al final del partido, que le permitían al Cadi recuperar el balón y dejar que pasaran los minutos sin que las viguesas anotaran.

A un minuto para el final el Celta Indepo se colocó a cinco puntos, 79-74, pero una vez más la precipitación en ataque hizo que se perdieran el balón cometiendo posteriormente falta, y al tener bandera el Cadi se fuera a la línea de tiros libres desde donde sentenció el encuentro.