Carnaval con aires de primavera en Porriño

Cientos de personas disfrutaron del Entroido porriñés este fin de semana, después de tres intentos frustrados por la lluvia

El cortejo fúnebre despide a la sardina por las calles de Porriño.

El cortejo fúnebre despide a la sardina por las calles de Porriño. / D.P.

Se hizo de rogar, pero, un mes después, el Carnaval de Porriño cumplió todas las expectativas y llenó las calles de Porriño de música, color, ingenio y diversión. La programación, concentrada en un fin de semana después de dos intentos previos que fueron cancelados por las previsiones meteorológicas, comenzó el sábado a mediodía con la lectura del pregón a cargo de los usuarios y usuarias de Afaga, y terminó el domingo por la tarde, con la incineración de la difunta sardina a orillas del Louro.

Javier, Fita, Lourdes, Merchi, Santiago y Elva fueron los encargados y encargadas de leer el pregón desde el balcón de la casa consistorial, y aprovecharon para pedir al alcalde un nuevo local, “a ver si este año, por nuestro 30 aniversario, Caroca no apaña algo mejor”. Además, los usuarios y usuarias de Afaga hicieron hincapié en el lema del Carnaval porriñés de este año, que reza “é un Entroido para todas e todos”. “Aquí los años no importan, siempre y cuando la tradición continúa; y nosotros de tradiciones sabemos mucho”, bromearon los pregoneros.

Xogo da Ola

El pregón dio paso al resto de la programación, con un desfile de comparsas en pleno mes de marzo y la celebración del tradicional Xogo da Ola, que este año cumplió su octogésima edición. Tampoco faltó la música ni, por supuesto, el velorio de la sardina, a quien lloraron en el Círculo Recreativo Cultural.

La lectura del testamento de la difunta fue uno de los momentos más divertidos y seguidos por los porriñeses y porriñesas, pues la finada sardina tuvo recados para todos y todas, sin faltar las críticas a Pedro Sánchez y Carles Puigdemont por la Ley de Amnistía.

A nivel local, la sardina dejó una finca al lado del río para el alcalde, Alejandro Lorenzo, para que construya el nuevo auditorio. A Andrés, el propietario de la agraciada administración de lotería X de la Suerte, le dejó “una caja de botellas de champán preparada para la lotería de Navidad de 2024”; y a Janet Novás, ganadora de un premio Goya, una calle del Progreso. “Gracias Janet por tu Goya y por hacer de Porriño la villa de la loba y no de la zorra, ¡vivan las abuelas!”, dejó escrita la difunta sardina, que, por fin, a las puertas de la primavera, pudo descansar hasta el Carnaval del año que viene.