Movilizados contra el apagón digital
Vecinos de la Subida ó Picoto, en Chapela, denuncian que se quedarán sin internet el próximo día 28 al negarse la empresa de telefonía a instalar la fibra óptica en la zona
La negativa para poner unos postes del cableado de fibra óptica por parte de la compañía de telecomunicaciones Movistar provocará un apagón digital a finales de este mes que afectará a varios vecinos de Chapela residentes en la Subida ó Picoto.
Según denuncian los afectados, la empresa les ha notificado por burofax que el próximo día 28 dejarán inactiva la línea telefónica y de ADSL de la que dependen, por lo que deben solicitar la migración, gratuita, de sus actuales instalaciones de cobre a la tecnología de fibra óptica. Pero a la hora de pedirlo se encuentran con la situación paradójica de que la zona en la que residen carece de esta tecnología.
Un par de postes
El problema se remonta a 2019, cuando la compañía comenzó a instalar la fibra en esa calle pero, incomprensiblemente, dejó sin cablear el tramo central con varias viviendas, cuyos propietarios llevan cuatro años solicitando que se complete sin lograr una respuesta positiva por parte de la empresa telefónica. “Solo sería necesario colocar uno o dos postes, no entendemos por qué no se hace. La única opción que ofrece Movistar es utilizar un router 4G, algo inviable puesto porque la cobertura es pésima, y tampoco nos ofrecen una alternativa al teléfono fijo de casa”, se queja Sara Carrera, una de las afectadas, que la semana pasada movilizó a los vecinos para protestar por la falta de alternativas.
Los vecinos argumentan que esta situación supone un importante trastorno para varios residentes, ya que en algunos casos compromete sus puestos de trabajo al teletrabajar desde casa. Además varios niños y jóvenes están adscritos desde sus centros escolares al programa E-dixgal de la Xunta para el que necesitan una conexión adecuada de Internet. “Estamos desesperados porque por un lado nos obligan a cambiar a fibra pero por otro no nos instalan la infraestructura necesaria”, lamenta Sara.
Ante esta situación han reclamado el apoyo del Concello para defender sus intereses ante la compañía. “Nos sentimos indefensos y ninguneados por Movistar; les exigimos el despliegue de la fibra óptica por la que llevamos esperando desde hace más de cinco años. Por eso pedimos también la mediación del Concello, para poder tener un servicio y posibilidades de comunicación acordes a 2024”, señala la afectada.
Problemas en Angorén
Pero este no es el único problema con las empresas de telefonía que padecen los vecinos de Chapela. En el barrio de Angorén los residentes de cinco casas también denuncian que se encuentran sin servicio desde el pasado mes de septiembre por un problema técnico con el cableado de Telefónica en su zona del que la empresa no se responsabiliza.
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