El instituto de Mos ya tiene su primer “punto naranja” contra el acoso escolar

El IES de Mos cuenta con el primero de los “puntos naranjas” contra el acoso escolar que se instalarán en los centros educativos públicos del municipio. Estos “puntos naranjas” son una iniciativa del gobierno gallego para combatir el bullying, y se instalarán en el cien por cien de los colegios e institutos públicos de Galicia.

La directora xeral de Ordenación e Innovación Educativa de la consellería de Cultura, Educación, Formación Profesional y Universidad, Judith Fernández, se trasladó esta semana a Mos para entregar personalmente el primero de los seis buzones que se instalarán en el municipio monsense. La representante autonómica estuvo acompañada por la alcaldesa, Nidia Arévalo, la concejala de Educación, Julia Loureiro, y miembros del Anpa del instituto y personal docente y directivo del centro.

Estos puntos naranjas contra el acoso escolar tienen un formato físico en las propias instalaciones y otro virtual a través de las webs de cada uno de los centros educativos. Además, cuentan con una imagen común y uniforme para que sean perfectamente identificados y accesibles. Su funcionamiento es como el de un buzón, a través del cual el alumnado puede comunicar o denunciar, desde una posición totalmente anónima, posibles situaciones de acoso o ciberacoso que sufran o perciban entre sus compañeros.

Para gestionar este buzón, en cada centro educativo se constituirá un equipo de actuación contra el acoso escolar integrado, entre otros, por el coordinador de bienestar emocional y convivencia y la persona orientadora del centro. De esta manera, el alumnado contará con un equipo de referencia al que dirigirse en caso de que lo necesite. Asimismo, en el nuevo protocolo educativo para la prevención, detección y tratamiento del acoso y del ciberacoso escolar, recientemente actualizado, se establece un procedimiento de intervención ante los posibles casos que se conozcan por esta vía.

En este sentido, la alcaldesa de Mos, Nidia Arévalo, reivindica la “tolerancia cero” ante cualquier conducta contraria a la convivencia y reclamó la implicación del conjunto de la sociedad “en esta tarea que requiere del compromiso de todos y cada uno de nosotros”.

La iniciativa forma parte del Plan integral contra conductas como el acoso escolar que ha impulsado la Xunta con el fin de blindar entornos escolares seguros, inclusivos y respetuosos. Para ello, dota a los centros escolares con los recursos necesarios para poder prevenir, identificar y actuar ante estas situaciones.