Los vecinos de Vilar se oponen al polígono de Louredo por su impacto ambiental

Presentan alegaciones avaladas por las firmas de 50 afectados | Advierten del incremento del ruido y la contaminación, el tráfico pesado por zonas rurales y la afección a la ruta jacobea

Los vecinos advierten de que el polígono se incrementaría el tráfico pesado por el núcleo de Vilar.   // ANTONIO PINACHO

Los vecinos advierten de que el polígono se incrementaría el tráfico pesado por el núcleo de Vilar. // ANTONIO PINACHO / Antonio Pinacho

Antonio Pinacho

Antonio Pinacho

Los vecinos de la parroquia redondelana de Vilar de Infesta expresan su rechazo al proyecto de construcción del parques empresarial de Louredo, con una superficie de 479.464 metros cuadrados en el límite territorial entre Mos y Redondela. La asociación vecinal ha presentado alegaciones ante la Consellería de Vivenda e Solo contra esta actuación respaldadas por cincuenta firmas al considerar que el desarrollo de esta zona industrial causaría importantes perjucios a los residentes del entorno.

En su escrito, los afectados argumentan falta de interés público o justificación social para la incorporación del ámbito de Louredo, ya que en el ámbito de la comarca de Vigo existen varios polígonos industriales como Porto do Molle, As Gándaras, A Veigadaña o la Plisan que ofertan actualmente suelo tanto en venta como en alquiler, con conexión directa a vías de alta capacidad y dotados de servicios. Además en todos existen aún posibilidades de crecimiento.

El polígono supondría la eliminación de la masa arbórea y afectaría a los acuíferos

Asimismo señalan que la construcción del posible parque empresarial de Louredo afectaría de forma muy negativa a los vecinos, especialmente a los habitantes del núcleo de Vilar.

El incremento de los tráficos por una carretera insuficiente, la eliminación de la masa arbórea, la afectación a los acuíferos, la construcción de grandes muros de contención, la elevación de las paredes de las naves industriales a apenas unos metros de sus residencias, los ruidos, los olores, la contaminación… todo ello contribuirá a romper con su estilo de vida tradicional, de núcleo rural gallego.

Además advierten del gran impacto paisajístico en los núcleos cercanos y en el Camino de Santiago portugués, que pasa por la zona.

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El gobierno local expresó el pasado mes de noviembre su apoyo a los vecinos y aseguró que también presentaría alegaciones al desarrollo de estas zonas industriales. La alcaldesa Digna Rivas exigió un estudio de impacto motivado por la cercanía a los núcleos de población y ante el daño que podría causar en el medio ambiente. “As obras deben contar con medidas de protección para minorizar os impactos así como franxas de protección para non repercutir nos núcleos rurais de Vilar-Iglesia e Millarada”, y advirtió de graves afecciones al patrimonio cultural redondelano

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