El proyecto de construcción de los parques empresariales de Louredo y Ameal, en Mos, no ha sido bien recibido en Redondela, donde los vecinos de Vilar de Infesta han expresado su rechazo a esta actuación. El gobierno local mostró ayer su apoyo a los vecinos y anunció que también presentará alegaciones al desarrollo de estas zonas industriales. La alcaldesa Digna Rivas exige un estudio de impacto motivado por la cercanía a los núcleos de población y ante el daño que podría causar en el medio ambiente. “As obras deben contar con medidas de protección para minorizar os impactos así como franxas de protección para non repercutir nos núcleos rurais de Vilar-Iglesia e Millarada”, puntualiza.

El Concello redondelano, por tanto, reclama un estudio de planeamiento para el desarrollo de ambos parques empresariales, puesto que se ubicarán en una zona “clasificada como Solo Non Urbanizable de Protección de Monte e Paisaxe”, indica la regidora, que denuncia que tal y como está planteada la actuación afectaría “a máis de 200 especies de animais e plantas que viven na contorna”. Además denuncia que el patrimonio cultural redondelano también se vería afectado, ya que dañaría elementos importantes como la Mámoa dos Valos o el paisaje del tramo del Camino Portugués de Santiago.

El proyecto también recibió informes negativos de la demarcación de Carreteras del Estado, que no apoya el acceso desde la N-550 (Redondela-Porriño) por la alta densidad de tráfico que soporta esta vía. Asimismo la Diputación emitió un informe desfavorable en relación al acceso desde la Estrada do Galleiro (EP-2906), así como por las dificultades añadidas por el viaducto elevado sobre el río y el riesgo de inundaciones que supone. “Se considera necesario un estudio de tráfico (actual e previsións futuras) que permita ter en conta a idoneidade dos accesos expostos no plan sectorial o a toma en consideración de novos viais que se deben planear no deseño dos novos parques”, denuncia Rivas.

La Estrada do Galleiro, por la que se pretende dotar de acceso a la zona empresarial, coincide con el trazado del Camino Portugués y no está preparada para soportar un tráfico pesado de mercancías, puesto que cuenta con una plataforma única de 6,20 metros con circulación a ambos sentidos y atraviesa un núcleo de población.