El colectivo de afectados por la ampliación de la autopista en Chapela protagonizó ayer una concentración para expresar su rechazo al convenio entre el Concello y Audasa –concesionaria de la AP-9– para la permuta del viejo edificio de Correos a cambio del terreno que ocupaba el antiguo colegio de Igrexa de Chapela.

El portavoz de los afectados, Francisco Puch, considera que el acuerdo con Audasa “es perjudicial” para la parroquia de Chapela ya que el convenio contempla la permuta del antiguo edificio de Correos, todavía utilizado por diferentes colectivos vecinales, por unos terrenos que ocupaba el viejo centro escolar “que fue expropiado durante el reciente proyecto de ampliación de la autopista, por lo que los terrenos que ya fueron pagados por todos los usuarios de la AP-9 con los peajes abusivos aplicados durante cuarenta años”, afirma.

La Asociación de Afectados solicitan al Concello la anulación del convenio, y que se reclame a Audasa un informe favorable conforme esos terrenos no son necesarios para su explotación, ya que tienen la concesión administrativa, y que el Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana, como titular de la AP-9 y de los terrenos expropiados, ceda los mismos de forma gratuita al Ayuntamiento, como se había negociado con el anterior gobierno municipal, y en compensación por los graves perjuicios económicos, sociales y medioambientales que llevan sufriendo los vecinos de Chapela.

Asimismo exigen que el antiguo edificio de Correos se pague con un valor de expropiación total de 161.000 euros, correspondientes al precio de mercado, como así se hizo con las demás expropiaciones que afectaron a las viviendas durante el proyecto de ampliación de la AP-9.

Desde la Asociación de Afectados pretenden que el dinero que se obtenga por el edificio “se invierta en la construcción de nuevos locales para los colectivos vecinales” y lamentan que el gobierno municipal “no haya tenido en cuenta nuestra opinión sobre este convenio”, concluye Puch.