En un pleno extraordinario y a cinco días de que finalice el año, la corporación municipal de Ponteareas aprobó por unanimidad el pasado miércoles la primera Relación de Puestos de Trabajo (RPT) de la historia de Ponteareas.

Durante su exposición pública el documento obtuvo 24 alegaciones de trabajadores, una de un sindicato y múltiples de los grupos de la oposición. Sin embargo, solo fueron estimadas parcialmente parte de ellas, las que no suponían una modificación sustancial del documento que exigiese una nueva exposición pública y, consecuentemente, retrasase su entrada en vigor.

Todos los grupos coincidieron en que la RPT aprobada supone un "acuerdo de mínimos" y se aprobó con la condición de que el gobierno local convoque posteriormente una comisión de seguimiento para analizar sus efectos y la inclusión de las alegaciones desestimadas.

"Supone un avance en la mejora de las condiciones de los trabajadores municipales y en su organización", señaló el alcalde, Xosé Represas, quien valoró que el documento permitirá "acabar con discriminaciones existentes durante años entre el personal municipal".

La más crítica con el documento aprobado fue la portavoz del PP, Belén Villar, quien denunció que esta RPT contiene discriminaciones entre el personal, al no situar a algunos trabajadores en el grupo que les correspondería o al no reconocer en las fichas individuales parte de sus funciones.

Una vez más, Villar criticó el informe del interventor aportado, al no haber incluido en el expediente una cuantificación económica de esta RPT. En este sentido, la exconcejal de Facenda y Persoal, advirtió al gobierno que no dispone de créditos para costear las mejoras porque debería ser el pleno quien activase el crédito necesario.

Tras las críticas, Represas le reprochó a Villar haber sido incapaz, en cuatro años, como concejal de Facenda e Persoal, de aprobar "ni un solo Presupuesto, ni RPT ni convenio laboral".

Por su parte, ACiP, que se había abstenido en la votación de la aprobación inicial de la RPT, se pronunció ayer a favor. "Es un acuerdo de mínimos y hay asuntos, como este, que tienen que estar por encima de posturas ideológicas" y añadió que "podíamos no apoyarlo pero si se aprueba este año las condiciones retroactivas ya comprenderán el 2018".

Por su parte, el portavoz de EU, Lino Costas, consideró que la RPT aprobada "no va a contentar a todos los trabajadores, pero teníamos que llegar a un acuerdo para desbloquear la situación y esperamos que la comisión de seguimiento comprometida por el gobierno sirva para mejorar el documento".