El paisaje de Panxón durante la noche mágica de San Xoán cambiará este año. Las multitudinarias hogueras de la playa no estarán esta vez junto a la tradicional verbena, aunque los miles de asistentes que invaden el arenal cada 23 de junio sí podrán escuchar a las orquestas porque tocarán a solo 300 metros. La comisión de fiestas ha decidido trasladar el baile del puerto al entorno del pabellón polideportivo, en la rúa Arquitecto Palacios, por seguridad, ya que las aseguradoras no se hacen cargo de los posibles daños.

Según explica su presidente Gelán Álvarez Lago, "ninguna compañía estaba dispuesta a firmar la póliza de responsabilidad civil correspondiente" para afrontar cualquier incidencia con los espectáculos musicales "por la inestabilidad del terreno sobre el que se montan las orquestas". Así que los organizadores de los festejos han preferido curarse en salud y reubicarlos en un lugar más seguro durante las cuatro jornadas de fiesta: el 23, 24, 25 y 26 de junio. "Nunca pasa nada hasta que pasa, así que nosotros preferimos hacer las cosas bien, con garantías", recalca.

Los soportes de los escenarios se asientan tradicionalmente encima de unas planchas metálicas dispuestas sobre la arena de la playa de Panxón. "Cuando sube la marea, el mar trabaja bajo las chapas y es un riesgo grande, por eso el seguro no cubre cualquier accidente o destrozo en los propios tráilers", argumenta Gelán Álvarez.

La parroquia ya ha podido experimentar el resultado del cambio de ubicación del baile con la reciente Festa da Primavera, organizada el pasado día 18 por la comisión para recaudar fondos para las celebraciones patronales. "Siempre hay quien se queje, pero fue un éxito", asegura el presidente, quien destaca además las ventajas del nuevo espacio "por su proximidad al Campo das Redes", donde se instalan las atracciones de feria. "Mucha gente nos felicita porque así llevan a los niños a los 'cachibaches' y tienen las orquestas al lado", subraya.