Fútbol | Primera Federación

El Celta Fortuna choca contra un muro

El filial, que estrelló dos balones en el palo, no encontró la forma de superar el entramado defensivo de la Ponferradina

Miguel Román dispara en la jugada que acabó en el palo

Miguel Román dispara en la jugada que acabó en el palo / MARTA G. BREA

Natxo Cabaleiro

0 CELTA FORTUNA: Ruly García, Manu Fernández, Yoel Lago, Pablo Meixús, Javi Rueda, Damián, De la Iglesias, (Miguel Román, min.46), Hugo Álvarez, Fer López (Joel López, min.76), Alfon (Lucas Antañón, min.87) y Raúl Blanco (Pablo Durán, min.46).

0 PONFERRADINA: Andrés Prieto, Carrique, Andújar, Leal, Lancho, Andoni López (Nil, min.76), Markel, Borja Valle (Yeray, min.88), Clavería (Llonch, min.61), Longo (Igbekeme, min.61) y_Ernesto (Abelenda, min.88).

Árbitro: Manuel Pozueta Rodríguez (Cantabria). Amonestó por los locales a Manu Fernández y Damián y por los visitantes a Clavería y Andújar. Incidencias: Vigésimo séptima jornada. Abanca Balaídos. Cerca de 3.000 espectadores.

El Celta Fortuna desaprovechó este sábado la oportunidad de dar un golpe encima de la mesa ante un rival directo en la lucha por los puestos de ascenso. Los vigueses tuvieron que conformarse con un empate sin goles ante una Ponferradina que se presentó en Balaídos con la firme y casi única intención de no perder para que el conjunto de Claudio Giráldez no le superase en la tabla clasificatoria. Y lo logró.

Porque el filial estuvo espeso. Tuvo la pelota en monopolio durante casi todo el encuentro pero sin encontrar la fórmula para derribar el muro defensivo planteado por los visitantes. No hubo velocidad en las circulaciones ni la magia ni la precisión en el último pase de las últimas jornadas. La Ponferradina tejió una tupida telaraña y el Celta Fortuna se enredó completamente en ella.

Pese a todo, el único conjunto que hizo méritos para haber añadido puntos a su casillero fue el local. Además de haber llevado en exclusiva el peso del encuentro y de que Ruly fue un espectador más del partido, los pupilos de Claudio Giráldez estrellaron dos balones en la madera, uno en cada parte.

De la Iglesia controla un balón durante el partido.

De la Iglesia controla un balón durante el partido. / MARTA G. BREA

Desde el pitido inicial quedaron claras las intenciones de ambos equipos. El Celta Fortuna quería el balón mientras que a la Ponferradina le estorbaba. Su plan de partido pasaba por defender, defender y volver a defender. En ataque, confiar en alguna posibilidad a balón parado o un pelotazo que pudieran cazar Ernesto o Longo. No hubo opción porque la tripleta de centrales locales, Manu Fernández, Yoel Lago y Pablo Meixús, estuvieron impecables.

El inicio, sin llegar a ser vibrante, prometía. Apenas se habían consumido cinco minutos cuando Raúl Blanco encontró el espacio para habilitar la llegada por banda izquierda de Hugo Álvarez. Su centro raso encontró el interior del pie derecho de Fer López, que remató ligeramente cruzado.

Hubo que esperar hasta el cuarto de hora para que el Celta Fortuna volviera a acercarse con peligro a la meta defendida por Andrés Prieto. Fue en un saque de esquina en el que Raúl Blanco probó suerte y a punto estuvo de tenerla. Pero su intento de gol olímpico se estrelló en el palo.

Tras esta ocasión, el partido se enfrió. Los vigueses no encontraban profundidad por banda y acababan una y otra vez cayendo en la invitación de la Ponferradina para progresar por el centro, donde por acumulación de hombres y reducción de espacios moría cualquier oportunidad de crear peligro.

Los visitantes, por su parte, tuvieron su primer y único acercamiento a la media hora, en un disparo lejando de Clavería, que acabó en saque de esquina tras rebotar en un defensa.

Todo pudo cambiar poco antes del intermedio, en un buen balón en profundidad de Manu Fernández para la subida por banda derecha de Javi Rueda, quien colocó un centro raso que acabó envenenándose y el meta visitante tuvo que despejar con una buena abajo.

Giráldez tampoco estaba contento con lo visto en la primera mitad y lo dejó patente con un doble cambio al descanso. Raúl Blanco y De la Iglesias dejaron su sitio a Pablo Durán y Miguel Román, respectivamente.

Los cambios mejoraron al Celta Fortuna, que empezaba a circular el balón con algo más de velocidad, a dar más amplitud a su juego y a encontrar espacios. Fue un cuarto de hora en el que parecía que los locales podían abrir la lata. Hugo y Alfon lo intentaron con dos potentes pero desviados disparos. Pero, sin duda, la oportunidad más clara fue para Miguel Román.

Manu Fernández puso otro gran pase interior para la incorporación del mediocentro, que definió con un ajustado lanzamiento raso al primer palo. Demasiado ajustado y demasiado al palo.

La Ponferradina se repuso del susto y consiguió volver a dormir el encuentro, fortificando aún más su entramado defensivo con los cambios.

El filial céltico volvía a tener el balón pero sin encontrar qué hacer con él. Aún así, siguió intentándolo y casi encuentra el merecido premio en los instantes finales. Primero con un buen disparo de Hugo tras una pared con Joel López que el portero visitante despejó con una gran intervención. Y, por último, con un potentísimo lanzamiento de Miguel Román desde la frontal que se marchó desviado.