El Real Madrid hizo gala de su poderío como equipo y hoy, simplemente, ha sido superior al Celta. Los de Zidane encaminaron el choque con el primer tanto de un brillante Karim Benzemá tras un pase de Toni Kroos filtrado por la espina central de la zaga celeste. Un error garrafal a la par que inusual de Renato Tapia le entregó en bandeja el segundo al francés en menos de diez minutos. El ariete blanco, polifacético, le regaló la sentencia a Marco Asensio en el ocaso del duelo. Los de Eduardo 'Chacho' Coudet se acercaron al premio antes del descanso con un testarazo de Santi Mina, pero no demostraron la garra suficiente para remolcar.