La derrota del Mallorca ante el Sevilla (0-2) mantiene al Celta a un punto de los puestos de la permanencia, por lo que el equipo vigués se presenta esta tarde en su estadio talismán del Ciutat de Valencia (18:30 horas, Movistar LaLiga) con opciones de cerrar el año 2019 fuera del descenso. Para esta cita contra el Levante, correspondiente a la decimoctava jornada de LaLiga, penúltima de la primera vuelta, los célticos recuperan a Denis Suárez, que ayer recibió el alta médica tras superar el esguince de tobillo que sufrió ante el Leganés. No parece probable que el salcedense aparezca en el once inicial de Óscar García, ausente en el entrenamiento de ayer en Balaídos y posiblemente en el partido de hoy en tierras valencianas por "motivos personales", como señaló el club al anunciar que el técnico de Sabadell no comparecería en la rueda de prensa previa al partido, celebrada ayer en Balaídos. En su lugar habló su hermano Roger, quien mantuvo el mismo hermetismo que Óscar García sobre el posible once ante un rival en el que destaca el excéltico Nemanja Radoja.
En la portería estará Rubén Blanco. La duda en la defensa es si vuelve Hugo Mallo al lateral derecho o continúa Kevin Vázquez, titular ante el Mallorca. Aidoo, Araújo y Olaza completarán la retaguardia céltica. En el centro del campo parece segura la presencia de Okay, Lobotka y Rafinha, ausentes el jueves en el compromiso de Copa. Pape Cheikh podría volver a la titularidad perdida tras los problemas físicos que sufrió en Butarque. Si los célticos se presentan en el Ciutat de Valencia con un 4-4-2 como dibujo táctico, también podría entrar en el once Brais Méndez. Iago Aspas y Pione Sisto son fijos para el técnico catalán, que también los reservó en el torneo del KO. Ante el Peña Azagresa brilló Juan Hernández como extremo derecho. El futbolista zurdo nacido en Lorca se ha ganado la confianza de los técnicos y a partir de ahora posiblemente cuente con más minutos en Primera División, después de debutar ante el Mallorca. Denis Suárez, de baja durante dos semanas, quizás tenga que esperar desde el banquillo la despedida de año.
Si Óscar García puede desplazarse desde Cataluña hasta tierras valencianas, el campo del Levante acogerá un duelo de banquillos con dos parejas de hermanos. Los López reciben a los García.
Paco López, que cuenta con su hermano José Antonio como segundo entrenador, ha encontrado en el excéltico Radoja la pieza que da equilibrio en el centro del campo de un equipo con buenos números en ataque. El comandante Morales ha perdido pegada en la primera mitad del campeonato, pero ha encontrado el relevo en Roger Martí, que suma media docena de tantos, los mismos que un Iago Aspas que esta semana recogía en Madrid su tercer trofeo Zarra consecutivo como mejor rematador español de LaLiga.
Los levantinistas afrontan la visita del Celta con la ilusión de ganar a un rival directo por la permanencia y romper así una racha sin ganar a los célticos en su estadio en la máxima categoría que se extiende a siete partidos.
El Levante llega reforzado a este partido tras su importante victoria de hace una semana ante el Granada y después de haber resuelto con comodidad la primera ronda de la Copa del Rey al derrotar al Melilla por 5-0 en un partido que sirvió para que futbolistas como Hernani, Sergio León o Coke cogieran confianza.
Paco López tiene las bajas por lesión de Óscar Duarte, Rubén Vezo, Iván López, Gonzalo Melero y Rober Pier, pero ha recuperado a los defensores Jorge Miramón y Carlos Clerc y también ha convocado al defensa del filial Eliseo Falcón.
A pesar de que Miramón se retiró lesionado en Granada, el lateral aragonés, en principio, se mantendría en el once inicial en el lateral diestro y Carlos Clerc, que se perdió el duelo en Los Cármenes por unas molestias, regresaría al equipo titular en detrimento de Toño García.
Tras descansar en la Copa, Radoja y Rochina volverán al centro del campo del equipo, junto a José Campaña y al macedonio Enis Bardhi, que sólo disputaron los últimos minutos del partido en Melilla, mientras que Morales y Roger formarían el ataque por tercera jornada seguida. Para su rival de hoy, el compromiso le ofrece la oportunidad de abandonar el pozo.
