Pione Sisto (Kampala, Uganda, 1995) vive momentos felices en el Celta, donde cumple su segundo año de contrato y goza del reconocimiento de técnicos, aficionados y club por su excelente rendimiento con la celeste. Ayer pasó por la sala de prensa de A Madroa para analizar su gran actuación en Ipurúa, donde fue clave en la victoria céltica al aportar tres asistencias de gol, porque el que le adjudicó el árbitro a Sisto lo reivindicó su compañero Sergi Gómez. No le importa lo más mínimo al internacional danés un gol de más o de menos. Lo que quiere, subraya, es colaborar en la victoria de su equipo. Minutos después de hablar con la prensa, la federación danesa hacía pública la lista de convocados para los partidos ante Montenegro y Rumanía, de clasificación para el Mundial de Rusia, en los que estará Pione Sisto en representación del Celta, porque su compañero Daniel Wass ya no cuenta para el seleccionador. Pero las buenas nuevas para Sisto no se quedan ahí, pues LaLiga recordaba por la tarde en Twitter el primero gol del danés con el Celta, en un partido en Cornellà-El Prat: "Hace justo un año, Pione Sisto nos regaló este jugadón", señalaban sobre la jugada que el céltico inició en campo propio, recorrió cincuenta metros con el balón pegado al pie, sorteando rivales, y al aproximarse al área grande realizó un gran lanzamiento que se coló en la portería del Espanyol.

Desde entonces, Sisto se ha adueñado de la banda izquierda del ataque del Celta. "Creo que ayer [por el domingo] mejoré mi rendimiento. Fui un poco más agresivo de lo que lo suelo ser y además pude ayudar al equipo con varias asistencias. Estoy muy contento por mi partido y por la victoria. Marcamos cuatro goles y acabamos con la portería a cero, eso siempre es importante", resumió su actuación ante el Eibar.

Sobre el gol que le otorgó el árbitro, pero que celebró su compañero Sergi Gómez, el danés apuntó: "No vi la jugada del gol, estaba lejos, pero Sergi es mi compañero y le creo. Lo importante es que acabó en gol, da igual quién marcó".

Y habla del Celta actual: "Con Berizzo era más uno contra uno, jugar ofensivo. Ahora son jugadas más tácticas, buscamos más salir con el balón desde atrás. Sólo hay que adaptarse a la filosofía de juego que quiere el nuevo cuerpo técnico y eso solo se consigue con tiempo", asume. También cree que su compañero Emre Mor necesita un plazo de adaptación, "como me ocurrió a mí", pues el turco-danés tiene que adaptarse a los nuevos compañeros, a una nueva liga, a unas nuevas costumbres y a un nuevo idioma.