Peligro: camiones en el carril bici

La rotonda construida hace un año para regular la circulación en el cruce de la calle Vista Alegre con avenida del Doctor Tourón, la avenida de Cambados y el acceso a Fontecarmoa, en la carretera PO-549, se ha convertido en un peligro no solo para la circulación rodada de este concurrido vial que atraviesa la ciudad vilagarciana, sino también para los ciclistas, pilotos de patinetes eléctricos y demás usuarios del carril bici.

A pesar de que está prohibido que hagan un giro completo en ella los vehículos con más de 7 metros de longitud, los vecinos del entorno y los usuarios de la ciclovía han podido comprobar que tanto esos camiones como otros más pequeños hacen cambios de sentido en esa rotonda con cierta frecuencia.

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El problema es que al hacerlo, los camioneros invaden el carril bici y ponen en peligro a sus usuarios, causan destrozos en la propia ciclovía y, a veces, se ven obligados a realizar varias maniobras, provocando atascos en la rotonda que también hacen peligrar la integridad de los demás automovilistas.

Accidentes

Tanto es así que ya se produjeron diversos accidentes en la zona y los desperfectos en la rotonda y el carril bici son más que evidentes.

Hay que recordar que en esta obra se invirtieron hace un año alrededor de 180.000 euros. Se instaló una glorieta que no es redonda, sino que tiene forma irregular y es rebasable en su perímetro interior, para facilitar la maniobrabilidad de camiones y autobuses.

Pero, hay que insistir, los vehículos largos no pueden hacer el giro completo, y sin embargo sí lo están haciendo con demasiada frecuencia.

Claro que tampoco se puede circular por calles peatonales, y sin embargo, son muchos los que lo hacen, de ahí que se trate de un viejo problema que no deja de agravarse a diario y también causa importantes trastornos.

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No solo en materia de seguridad vial, sino por los desperfectos que está originando el paso de tantos vehículos por zonas que no han sido diseñadas para soportar una densidad de tráfico así.

Rotura del piso

De ahí la rotura de tramos de hormigón, grandes losas de piedra y demás materiales empleados en calles peatonales como Vista Alegre, Arzobispo Lago, Alcalde Rey Daviña y el entorno de la plaza de abastos.

Lugares donde a diario circulan y estacionan una buena cantidad de vehículos –tanto turismos particulares como furgonetas de reparto y camiones– que se saltan las limitaciones establecidas.

Ni que decir tiene que el mal estado del piso en algunos tramos peatonales de la ciudad vilagarciana pone en peligro a los viandantes.

Especialmente si se trata de personas mayores, de ahí las caídas que con cierta frecuencia se producen en estos lugares.

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