El antiguo esqueleto de Castelao revive y se convertirá en un edificio de pisos turísticos

Ya formaba parte del paisaje urbano de A Illa y todos los vecinos del municipio se habían acostumbrado a ver el inicio frustrado de un edificio en la avenida Castelao, en la parcela conocida como el área de reparto número 14. Desde hace dos semanas, una empresa constructora ha comenzado a obrar en el inmueble con el objetivo de finalizar un edificio que es ejemplo de lo que ocurrió a finales de la primera década del siglo con la caída del “boom” inmobiliario.

En principio, la obra tiene como principal objetivo la construcción de un edificio que albergará 28 pisos, los cuales serán destinados a usos turísticos, funcionando como alojamiento vacacional, un único de negocio que está muy en auge en los últimos años y que en A Illa comienza a despuntar por el interés que despierta el pequeño municipio arousano, especialmente en verano. La firma solicitó todas las licencias oportunas y el respectivo proyecto en el Concello de A Illa, que le dio el visto bueno. La firma procedió entonces a vallar toda la zona y ya ha comenzado a realizar algunas actuaciones en el esqueleto del edificio, como acondicionar los huecos de los ascensores y comprobar cual era el estado de toda la estructura.

Los terrenos habían sido adquiridos por una firma a un precio desorbitado y comenzaron con la promoción de las viviendas que se iban a construir y cuyo precio era todavía más estratosférico. Los promotores no llegaron a vender ninguno, lo que acabó provocando que la empresa quebrase, dejando deudas con los propietarios de los terrenos y los diferentes proveedores de la obra. Durante más de una década, el edificio ha servido como lugar de refugio para indigentes y punto de celebración de botellones antes de acabar siendo tapiado. Sin embargo, el principal problema era la imagen que ofrecía del casco urbano isleño ya que la avenida Castelao es una de las principales calles del municipio, y todos los visitantes que pasaban por ella, acababan encontrándose con ese mamotreto que permanecía abandonado a la espera de que el verdín se acabase apropiando de todo el espacio que ocupaba.

El de Castelao no es el único mamotreto que permanece abandonado a medio construir en A Illa, como vestigio de una época en la que el ladrillo marcaba el fluir económico. De esos quedan muchos ejemplos en prácticamente toda la comarca, aunque muy pocos encuentran quien retome el proyecto.

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