La "dama del Ulla" brilla, pero por su ausencia

Los pescadores asociados a las cofradías de Rianxo y Carril que habitualmente se dedican a la pesca de lamprea en el río Ulla se preguntan dónde está ahora el preciado pez.

Y es que lo que prometía ser un año de abundancia, teniendo en cuenta el elevado caudal, se ha convertido en un arranque de temporada nefasto, con apenas veinte ejemplares capturados desde que comenzó, la semana pasada.

Truchas y escalos

Lo peor de todo es que “a pesar de las fuertes corrientes se ven subir truchas y escalos, pero las lampreas, que son más fuertes y se veían hace un mes, ahora no aparecen por ninguna parte”, indican los integrantes del colectivo de los valeiros, que es como se conocen popularmente.

Tal es su decepción que algunos de ellos ya dejaron de largar sus nasas butrón en la zona habitual de pesca –a la altura de Pontecesures– para dedicarse a otros recursos o, si cabe, esperar tiempos mejores para la “dama del Ulla”.

Solo una embarcación

Ayer, sin ir más lejos, solo una embarcación acudió a levantar sus nasas, y cuando estaban en cubierta sus tripulantes comprobaron que volvían a estar vacías.

“Los demás ya no están largando sus aparejos porque no hay lampreas, y yo también dejaré de hacerlo si esto sigue así”, indicaba el patrón.

Hoy empieza la campaña de la lamprea en el Ulla, pero los primeros peces podrían hacerse esperar

No era otro que Ramón Agrasar de Villanueva, uno de los más experimentados valeiros. El mismo que explica que “se desconocen las causas por las que no hay lampreas”.

Viento del sur

A lo que añade que “tampoco sabemos si es que está influyendo negativamente el viento del sur”.

A expensas de lo que pueda suceder en próximos días con el cambio previsto en las condiciones meteorológicas y una más que probable influencia anticiclónica, éste y demás pescadores lamentan la escasez del cartilaginoso y primitivo pez que tan buenos ingresos puede depararles.

Al igual que lamentan los daños sufridos en las nasas a causa de la intensidad de las corrientes del Ulla, siendo ésta una de las razones por las que muchos valeiros prefieren esperar.

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