El césped instalado entre la plaza de Galicia y la calle Alcalde Rey Daviña, cuando se procedió al embellecimiento de este céntrico espacio peatonal, se había convertido en un auténtico problema, a causa del gasto continuado que suponía. Y la solución ha sido arrancarlo definitivamente.
Los servicios de jardinería del Concello de Vilagarcía procedieron ayer a levantar las deterioradas planchas de lo que algún día había sido hierba, ya que, como todas las anteriores, estaban totalmente “machacadas”.
En su lugar han empezado a plantar flores idénticas a las que se colocaron en la plaza de la Independencia y en la calle que la une con la propia Praza de Galicia.
De este modo el gobierno del socialista Alberto Varela trata de mejorar la imagen que ofrece este concurrido lugar, ya que cada vez que se estropeaba el césped afeaba todo el entorno. Al mismo tiempo consigue frenar una “sangría” económica considerable, puesto que el césped ya había sido sustituido en otras ocasiones anteriores.
Demasiados inconvenientes: perros, coches y peatones
Lo cierto es que la hierba nunca se consolidó en los jardines de la plaza de Galicia por diferentes motivos. Por una parte, parece que a causa de un deficiente sistema de riego.
Pero, sobre todo, porque son muchos los peatones que no dudan en pasar sobre él, tanto a pie como en patinete o con el carrito de la compra o de bebés.
También estaba estropeado debido a la cantidad de perros que orinan y defecan en esos jardines.
E incluso, a pesar de tratarse de una zona peatonal, tanto el césped como el sistema de riego y los focos colocados a ras de suelo estaban destrozados a causa del ir y venir de vehículos.
Sobre todo furgonetas de reparto que no dudan en invadir los jardines y que ahora deberán tener más cuidado, salvo que también vayan a aplastar las flotes.
