Una de las grandes reivindicaciones sobre Areoso es la necesidad de elaborar un plan de protección adecuado que sirva para frenar su enorme deterioro. La pequeña lengua de arena situada en pleno corazón de la ría de Arousa posee una enorme riqueza, no solo en restos arqueológicos, sino también en patrimonio natural por las aves que anidan en ella. Sin embargo, el deterioro al que ha sido sometida la duna ya ha provocado un gran retroceso de la misma, así como que el islote se parta en dos en cada marea.

Concello, Cofradía y los propios arqueólogos siempre han defendido la necesidad de aplicar medidas de control en el acceso de personas a Areoso, algo en lo que está trabajando, desde el pasado año, la Consellería de Medio Ambiente. El objetivo es reducir el impacto humano en un espacio natural que se encuentra en una situación muy complicada.