Juan Maneiro explicó ayer que "la Xunta nunca permitió que se comercializara mejillón con referencias como 'rías gallegas' y otras similares si el molusco no tenía esta procedencia, y de hecho abrimos 42 actas de inspección por este motivo en 2014 y 2015, una de las cuales originó un expediente sancionador y otras cuatro están con propuestas de sanción por empleo irregular de denominaciones relativas al origen".

En la Consellería do Mar dicen ser conscientes de que "la buena reputación del producto alimentario gallego a nivel internacional" puede favorecer "la tentación de utilizar etiquetas alusivas a Galicia en productos que no son de esta región, pero para eso se creó una normativa específica de etiquetado y para eso efectuamos controles".

Maneiro garantiza que "seguiremos trabajando para erradicar y castigar el mal uso del nombre de Galicia cuando se use producto foráneo y se intente engañar al consumidor haciéndolo pasar como gallego"; otra cosa bien diferente es que se impida recurrir a la marca Galicia al molusco cultivado en sus bateas por el simple hecho de no pertenecer a la DOP.