No hay marcha atrás. Colectivos ecologistas y sociales y representantes del sector del mar han dado un ultimátum al Ministerio y a la Consellería de Medio Ambiente. Exigen que las administraciones competentes tomen cartas en el asunto y que respondan de inmediato a un escrito en el que exigen la paralización inmediata de los vertidos portuarios que se están depositando en una zona comprendida entre las islas Sálvora y Ons, en plena boca de la Ría de Arousa.

Portavoces de las Plataformas de Defensa de las rías de Pontevedra, Vigo y Arousa aclararon que esta situación se lleva arrastrando desde hace ya diez años, pero que ahora se ha producido un nuevo y sangrante caso que tiene como origen el dragado del puerto de Vigo. El presidente de la PDRA, Xaquín Rubido, explicó que con este nuevo vertido se depositarán millones de metros cúbicos de unos lodos que, según los ecologistas, poseen todo tipo de residuos industriales y químicos.

Este nuevo caso hizo saltar la voz de alarma por lo que los colectivos han remitido, por enésima vez, un escrito tanto al gobierno central como a la Xunta para que dejen de autorizar un "atentado medioambiental sistemático".

Soluciones

Los colectivos explicaron que parte de la solución vendría de la mano de un compromiso entre las administraciones para modificar una normativa específicamente gallega que regule los dragados portuarios y que, según ellos, la que está en vigor a día de hoy está "obsoleta". En esta línea, Rubido sentenció con el "doble lenguaje" de las administraciones que "por un lado hablan de los ahorros económicos que supone verter en el mar y por otro lado proclaman a favor del medio ambiente".

Las asociaciones lamentan que sean las propias administraciones las autoras de este tipo de "atentados" y atacan no sólo al gabinete de Manuel Vázquez sino al propio Ministerio de Medio Ambiente del que "no hemos tenido respuesta a ninguno de los numerosos escritos que les hemos mandado desde que llegó Zapatero a la Moncloa".

Así las cosas, los afectados lo tienen claro. Septiembre es la fecha límite para establecer una línea conjunta de actuaciones que podría desembocar en movilizaciones a nivel autonómico sobre este tema.

Los colectivos consideran "vergonzoso" que se guarde silencio en un asunto que, en este caso, apunta con el dedo acusador al Puerto de Vigo. De hecho, el presidente de la PDRV, Eloy Piñeiro Hermida, reseñó que ninguna de las empresas establecidas en la rada viguesa cuenta actualmente con un sistema de recogida de residuos sino que "verten directamente al mar, salvo contadas excepciones". Además, reseña que "la Ría de Vigo está sometida a una vigilancia exhaustiva por parte de la Unión Europea por incumplimiento de los parámetros exigidos, y por ello ahora depositan los lodos en Arousa, donde el control no es tan riguroso".

Ahora a los afectados sólo les queda esperar y lo curioso es que sus reivindicaciones no sólo se centran en este vertido concreto del puerto de Vigo, sino que van más allá y exigen cumplimiento riguroso de las normas a todas las autoridades portuarias. Los resultados están por ver. Pese al margen vacacional, los distintos colectivos se muestran bastante pesimistas sobre una posible respuesta de las administraciones que, de llegar, abriría un hueco importante para las negociaciones.

Por el momento, aclaran, la realidad es que millones de metros cúbicos de lodos contaminantes navegan a sus anchas por la aguas gallegas, una situación a la que "las administraciones hacen oídos sordos".