El museo de Cera presentó ayer su estatua del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, una figura de 1,91 de estatura, con 250 gramos de pelo y una piel más pálida que la que suele lucir en televisión, y ante la que una activista de Femen, con el pecho descubierto, exigió "coger de las bolas al patriarcado".

La activista, en la línea de otras acciones que suele protagonizar el grupo feminista Femen, surgió entre los medios que asistían en el patio del museo, en la madrileña plaza de Colón, decorado con banderas de Estados Unidos, alfombra roja y globos.

Allí, la mujer, una joven con gafas y el pelo en una coleta, se despojó de la cazadora gris que vestía y encarándose con la estatua de Donald Trump gritó "hay que coger de las bolas al patriarcado".

Vestida con unos "legging" burdeos y botas negras, la joven llevaba escrito en el pecho con letras negras "grab back" y en la espalda "grab patriarchy by the balls", frase que ha gritado en inglés y luego en español. Mientras, el portavoz del museo, Gonzalo Presa, intentaba taparle los pechos. Después, Femen España reivindicó la acción en las redes sociales.