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VISADOLinda Guilala: "Para nosotros la psicodelia es pop"

Los vigueses cuentan con una gran proyección lejos de su tierra natal

Linda Guilala son Eva María López e Iván López // Sue Rainbow

Pudiera darse la paradoja de que tengan más público en Berlín que en su propia ciudad, y es que Linda Guilala es un grupo vigués con una gran proyección fuera de Galicia, como lo demuestra el hecho de que hayan compuesto la nueva sintonía del programa Disco Grande de Radio3.

Iván González y Eva María López, o simplemente Iván y Eva, han dado un gran paso con "Psiconáutica", un álbum que les acerca al sonido de My Bloody Valentine, The Jesus & Mary Chain, Slowdive o Los Planetas. Hoy lo presentan en casa, en La Fábrica de Chocolate. Es Iván el que contesta a VISADO.

-En el título del álbum, "Psiconáutica", e incluso en el trabajo gráfico, remitís a la psicodelia. Tradicionalmente los discos psicodélicos han sido de largo desarrollo, con canciones largas. ¿Habéis tratado de subvertir esta norma no escrita en este trabajo de 42 minutos?

-Creo que no, me explico: en general la gente suele confundir lo progresivo con la psicodelia y son cosas completamente distintas. Para nosotros la psicodelia es pop, como The Idle Race, Count Five, o The Move en sus orígenes y otro montón de grupos mas de los 60. La deformación a las estructuras progresivas es posterior y ya rock. En un principio creo que se trataba más de cuestiones armónicas y rítmicas diferenciales, pero siempre dentro del concepto de canción pop "Psiconáutica" nunca ha querido ser un disco de psicodelia, ni tampoco inventar nada nuevo. Para nosotros es más shoegaze puro y duro, o incluso por momentos noise pop le iría mejor, pero es cierto que existe un brutal nexo de unión estético y conceptual entre ambas corrientes aunque las separen más de 30 años. A la gente en España le resulta más fácil relacionarse con el término "psicodélico" que con otros, pero vamos, creo que se hace de forma errónea.

-¿Qué música habéis escuchado durante la composición y qué grupos pensáis que os han podido influir para hacer "Psiconáutica"?

-Realmente de todo. En mi caso personal, mis escuchas del último año han sido al 90 % sobre grupos de synth pop y post punk de principios de los 80, mucha música alemana, belga y francesa, pero en general, escuchamos y disfrutamos sin complejos ni prejuicios un espectro muy amplio de cosas, desde grupos de chicas de los 60 a música tradicional brasileña, pasando por todo el C86 y evidentemente un montón de grupos shoegazer. Realmente nunca hemos tenido ningún referente claro a la hora de hacer un tema o buscar un sonido, siempre hemos sido más de trabajar y luego dejar que la gente que nos rodea lo etiquete y defina, que nos diga suena como tal o como cual, o este es un disco de este estilo.

-Pese a los siete años transcurridos entre los dos álbumes, "Bucles infinitos" y "Psiconáutica", no habéis parado de tocar, publicar singles y EP. Sin embargo, sí se nota un importante cambio entre el sonido entre el primero y este segundo trabajo de larga duración. ¿Este nuevo sonido es fruto de una evolución gradual desde 2009 hasta ahora?

-Sin duda, es el resultado de la búsqueda de equilibrio entre estudio y directo. Realmente el grupo nació como una formación sólo para hacer canciones y grabarlas. Cuando el grupo finalmente comenzó a tocar, el sonido fue evolucionando, las grabaciones se adecuaron más a la realidad y a pensar en los conciertos. Este trabajo es un poco el fruto de eso sin renunciar al mismo tiempo a poder utilizar el estudio de grabación como un instrumento más. Hay algunas partes del disco que o bien no pueden ser tocadas o serían prácticamente imposibles de replicar de cualquier manera en directo o en una nueva grabación.

-La mayoría de los títulos remiten a la química y a la psicología: "principio activo", "alcaloide", "desorden químico", "fobia social", "hiperactividad", "anancástico"... ¿Hay un propósito conceptual en este álbum?

-Sí, este álbum podría haberse llamado también "Terapia", y de eso se trata. Básicamente, es nuestro disco más egoísta y personal y estamos totalmente desnudos en él. Es la forma de cerrar una etapa tanto personal como sónica que se abría con "Xeristar". Con este trabajo hemos sacado todo lo malo que nos podía quedar dentro y hemos prescindido de cualquier cosa o persona tóxica que nos rodease. Creo que el resultado ha merecido la pena a todos los niveles.

-¿Cómo surgió la idea de intercalar esas diez canciones de en torno a un minuto de duración?

-Hubo como dos partes muy claras en la composición del disco: la de los temas más pop y clásicos, que fue de puro local de ensayo y en la que ya había una intención conceptual del trabajo, y otra más de estudio posterior en la decidimos crear esa sensación de viaje con las piezas instrumentales. Hay que decir que en la mayoría de ellas son fragmentos de pistas de los temas del disco, minimizados, sampleados, invertidos. Se trataba de buscar con todo ello una mayor sensación de unidad y conceptualidad.

-¿Cómo es vuestra forma de componer? ¿Tenéis perfectamente divididas las tareas entre los dos?

-Se podría decir que Eva es la melodía y armonía; y yo, el ritmo y la letra. En general suele ser así. Después es cómo que en cada tarea que asumimos cada uno hace su parte. En la producción yo me hago más cargo de grabar y ella de mezclar; posteriormente ella se encarga del arte del disco y yo de estas tareas más promocionales o la contratación. Intentamos ser lo más autosuficientes posible en cada aspecto del trabajo.

-Habéis comenzado a trabajar con vosotros Óscar, de A Veces Ciclón, Musel, Mullet y ex de Triángulo de Amor Bizarro. ¿Ha influido en vuestro estilo esta incorporación?

-Bueno, Óscar no participó en la grabación de este disco, acaba de incorporarse y ha traído al grupo la solidez y estabilidad que necesitábamos a todos los niveles. Creo que en definitiva el grupo ahora suena mucho más compacto y nivelado y es genial hacer cosas con alguien tan trabajador, talentoso y positivo.

-¿Qué significó para vosotros componer la sintonía del programa Disco Grande, de Radio3?

-Es de esas cosas que aún no acaba uno de asimilar. Pasé toda mi adolescencia escuchando a Julio [Ruiz] en mi habitación y descubriendo un montón de grupos que me marcarían para siempre. Y ahora mi grupo suena cada día en su programa. Es raro pero genial al mismo tiempo.

-Ya estáis trabajando en nuevas canciones. ¿Vuestro próximo trabajo será un álbum, un single, un EP...?

-Ahora mismo estamos trabajando con Marco Maril de Apenino en una serie de remezclas del disco, en las que podremos escuchar algunos temas de una forma totalmente mutada. La verdad es que haremos canciones como siempre y veremos qué nos pide el cuerpo.

-¿Qué podéis contar de vuestras experiencias en el extranjero, en Reino Unido, Berlín...?

-El ambiente en los conciertos en general es mucho más cultural y esto está verdaderamente bien, que la gente hable contigo de música por encima de todo lo demás, las críticas constructivas, la seriedad en el trabajo son geniales y siempre hace que nos dé una mezcla de pena y vergüenza vivir en un país como España con dos problemas muy básicos al respecto. Por una parte, la cantidad de prejuicios sobre determinados estilos o formas de expresión artística; y por otro, la de un público con un bajísimo nivel cultural que en muchas ocasiones no tiene ni la menor idea o le importa tres pepinos lo que le pongan delante, simplemente es ocio y algo que suena de fondo mientras charlan y están de fiesta.

-¿Tocar "en casa" os impone más que hacerlo en el extranjero?

-A mí no, la verdad. Tocar en casa, tocar en Vigo, es un poco una distorsión, en la que se mezclan los cumplidos de los amigos y el odio de los enemigos. Creo que fuera en general el público es más objetivo, ya que no te conocen de nada y únicamente juzgarán tu trabajo en ese mismo instante, así que si la haces la pagas. Si alguien se te acerca con tu disco recién comprado debajo del brazo después del concierto tienes verdaderamente claro que al italiano, alemán o británico de turno le ha gustado de verdad.

-¿Qué grupos de Galicia os gustan?

-Hay muchísimos motivos para estar orgullosos de la música que se está haciendo en Galicia. Yo ahora mismo destacaría a los Chicharrón, Emilio José, Apenino, When Nalda Became Punk... Pero hay muchísimos grupos que me gustan. La verdad es que somos la caña, una verdadera potencia a nivel nacional, pero muchas veces la gente aquí no se da cuenta.

Los componentes del grupo vigués

Psiconáutica

  • De las cenizas de Juniper Moon floreció en 2009 una nueva banda, Linda Guilala. Su primer disco, "Bucles Infinitos", combinaba melodías de cristal con arreglos de guitarras turbias. Manejaban unos referentes ambiciosos: My Bloody Valentine, Ride, Los Planetas. Era una banda en ciernes, aunque eso sí, con buenas canciones y por tanto a seguir. Y seguirlos ha equivalido a ser pacientes: en este tiempo han sacado singles, Eps y Mini-LPs, además de la nueva sintonía del programa de Radio 3 Disco Grande, y han dado conciertos en diferentes países de Europa además de perderse intensamente en las numerosas producciones que han llevado a cabo desde los estudios Kaiju en Vigo. No pararon, pues, pero faltaba una obra larga de reafirmación o ubicación.¿Qué lugar corresponde a Linda Guilala en el pop español? La respuesta se llama "Psiconáutica" (Elefant, 2016), y ha llevado sus temas de pop burbujeante y distorsionado a los niveles que sus influencias prometían. Una burbuja de sonido saturante, adictiva, amniótica. Un ruido blanco denso, sensual, que busca transportar al oyente a realidades paralelas sin más estimulantes que su sonido. La intro (muy "Planetaria") de "Principio activo" desemboca en "Monstruo", primer aviso de crecimiento exponencial de Linda Guilala. La deliciosa voz de Eva se mezcla con los teclados y el feedback controlado,en una melodía que casi recuerda a Triángulo de Amor Bizarro. No son su modelo: la energía de la estampida desbocada de los Bizarro no es el terreno de Linga Guilala, ellos viven en una levitación extática entre latigazos de ruido blanco. Tiempo suspendido. Orquestan tormentas sónicas brumosas perfectas como "La última vez (1ªRecidiva)", "Ansiedad" o "Cosas nuevas", primer single de un disco que avanza sin pausas, engarzando pequeñas suites casi abstractas con temas más ortodoxos en un viaje en corrientes circulares.Producción brillantísima, letras con dobles sentidos, melodías pata negra... "Psiconáutica" es un ejercicio de estilo white noise o shoegazer sin dobleces. Pocos tan pluscuamperfectos, arriesgados y radicales como el de Linda Guilala vas a poder escuchar esta temporada. // Octavio Beares

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