Antía Cal Vázquez, Tita para sus alumnos, fundó en 1961 en Vigo la Escuela Rosalía de Castro, con una educación totalmente bilingüe, y puso en marcha una de las más singulares experiencias pedagógicas de su entorno. Ahora, a sus lúcidos 92 años, realiza una apasionada defensa del oficio de maestro en el documental "A palabra xusta", que se estrenará el próximo año.
El trailer de este trabajo, dirigido por Miguel Piñeiro, se presentó el pasado fin de semana en Muras (Lugo) en el marco de un homenaje tributado por este concello, que la declaró hija adoptiva y le puso su nombre al colegio de la villa. El trailer ha tenido un enorme éxito en las redes sociales y solo con el boca a boca y en cinco días ya ha superado las más de 16.000 visualizaciones.
"A palabra xusta" remite al nombre de un juego inventado por la maestra para sus alumnos: al acabar la clase cada niño tenía que escribir en un papel y de la forma más sintética lo que aprendió en la clase del día, si fuese posible en una sola palabra. Las respuestas se ponían en la pared y entre todos elegían la mejor.
Ante la cámara, Antía va dibujando sus recuerdos, sus pensamientos y sus emociones y buscando también ella la palabra justa para relatar sus orígenes, su infancia, el despertar de su vocación, el ansia por saber, su pelea para poder estudiar y su encuentro con una universidad anclada en el pasado. Habla también de la llegada del gran amor de su vida -el oftalmólogo Antón Beiras García- al que le uniría la pasión por el progreso, la evolución científica y la libertad, y la fundación de una escuela que rompía con todo lo establecido.
El documental está rodado en la casa de la protagonista, en las tierras del Alto Eume, donde vive una vida tan silenciosa como fructífera. Desde allí, Antía realiza un viaje a través de la memoria de las cosas, los objetos que llenan los cajones y armarios y llevan al espectador a un tiempo ya pasado.
El documental -que se encuentra en proceso de montaje en estos momentos- cuenta con la música original de Nani García y la colaboración especial de Javier Gutiérrez y Rebeca Montero.
