Matemáticas, Lectura y Ciencias. El trío de Pisa no remonta su inclinación. Los resultados del conocido informe de educación vuelven a demostrar que algo falla en la maquinaria educativa española ya que nuestros alumnos siguen por debajo de la media europea. Galicia va mejorando posiciones en Lectura y en Ciencias aunque el Matemáticas se ha quedado estancada en sus 489 puntos. Sin embargo, esto son generalidades. Toda una generación de alumnos gallegos desmonta los datos negativos y destaca muy por encima en estas y otras asignaturas.

Estas excepciones se “cocinan” en una perfecta receta en la que entran las capacidades personales de los alumnos, el esfuerzo de sus padres por inculcarles el interés por los estudios desde muy pequeños, el esfuerzo del centro educativo y de unos profesores en concreto que restan horas a su tiempo libre para motivar a los estudiantes con diversas actividades y, por último, el apoyo institucional necesario para sacar adelante los proyectos y poder despuntar, por ejemplo, en concursos nacionales e internacionales.

Un grupo de estos alumnos de toda Galicia que estudian la ESO, bachillerato y primer curso de la universidad desgranan ellos mismos el porqué de sus excelentes resultados en materias en las que otros compañeros suspenden.

“Es esencial que en los centros se fomente el deseo de aprender”

Antonella Menta, Premio Extraordinario ESO y 10 en Bachillerato

Una nota media de 9,75 en la ESO -por lo que mereció el reconocimiento a la Excelencia Académica en el Premio Extraordinario de la ESO- y de 10 en el primer curso de Bachillerato sitúan a Antonella Menta en la elite de los alumnos gallegos.

Esta estudiante del colegio Las Acacias de Fomento, nacida en Uruguay hace 17 años pero que vive desde niña en Vigo, es la mayor de cuatro hermanos. Sus asignaturas favoritas son Historia del Arte, Literatura y, aunque estudia bachillerato de sociales, también las matemáticas. “En el futuro me gustaría llegar a crear arte, trabajando como directora y guionista de cine y televisión”, afirma. A pesar de sus magníficas calificaciones, no se pasa ni mucho menos todo el día estudiando en casa. “Me gusta leer, dibujar, hacer teatro, dar catequesis y hacer voluntariado”, relata.

Antonella ha participado en numerosos concursos como la Olimpiada de Química, donde quedó la segunda de Vigo, y la Olimpiada de Matemáticas y, actualmente, está en la última fase de selección para la prestigiosa beca Kemper, que elige a solo cuatro jóvenes europeos para estudiar un año preuniversitario en el colegio Philips Academy de Andover, en Massachusetts, Estados Unidos, uno de los cinco mejores centros del mundo.

“Esta beca busca en los alumnos seleccionados dos objetivos, que son aquellos que realmente deberían buscarse en el sistema educativo actual: la excelencia académica y la personal. La excelencia académica puede estar condicionada por la capacidad del alumno, pero no se debe limitar a un par de asignaturas en las que solo se memorice contenido. La capacidad de los alumnos españoles es probablemente muy superior a la que muestran los informes”, opina.

Antonella destaca que su colegio fomenta el desarrollo de una educación en la excelencia. “Se nos enseña ante todo a aprender, a querer aprender, a buscar siempre algo nuevo. No es un mero estudio tedioso, sino una búsqueda de conocimiento porque nos gusta la materia y la vemos útil para un futuro; y eso actualmente no se fomenta en muchos sitios”, lamenta la joven.

“La Tecnología nos ha llevado a conocer en Holanda a un astronauta, y eso motiva mucho”

Alumnos del IES Os Dices de Rois, campones europeos de la Volare Space Robotics Competition

Desde Rois al espacio. Los alumnos del Centro Público Plurilingüe Os Dices han encontrado en la asignatura de Tecnología la llave para acercarse a la Estación Espacial Internacional.

Un profesor muy implicado en la causa, Javier Méndez, ha logrado en los últimos años que esta materia, que aborrecen gran parte de los alumnos españoles, sea la estrella de su centro.

A finales del pasado mes de octubre un equipo formado por los alumnos Andrea Conde, Sara Conde, Sara Iglesias, Alba Sorribas, Fabián Vázquez y Sergio Baleirón resultó campeón europeo de la Volare Space Robotics Competition, que organiza la Agencia Espacial Europea (ISS) y que se celebró en la localidad holandesa de Noordwijk. Lo lograron gracias a un robot que construyeron y que tenía como función transportar suministros a la ISS. También el año pasado dos alumnas del centro triunfaron en el concurso YouTube Space Lab, que se ganaron experimentar en Washington la gravedad cero.

“La experiencia fue una pasada; viajar a Holanda, a estudiantes de otros países, hablar con un astronauta que estaba en la Estación... fue genial”, asegura Fabián Vázquez, de 15 años.

Hasta tal punto los alumnos han disfrutado de esta asignatura que varios de ellos ya tienen claro su futuro dentro de este ámbito. “Yo quiero estudiar cualquier cosa relacionada con la tecnología”, afirma el estudiante.

“Javier nos motiva mucho y siempre nos animaba a seguir cuando el proyecto no funcionaba. Incluso quedaba con nosotros fines de semana y días de vacaciones para que consiguiéramos terminarlo a tiempo. Creo que influye mucho tener a un profesor así para que te guste una materia y destaques en ella”, añade Alba.

“Mis padres me enseñaron a sacar lo mejor de mí”

Laura Barreiro, mejor nota gallega en la pasada selectividad

Un espléndido 13,704- lo que equivale a un 9,9 del sistema anterior de puntuación- convirtió a Laura Barreiro Fernández en la alumna gallega más brillante en las pasadas pruebas de selectividad. La que fuera alumna del colegio Rosalía de Castro de Vigo y que consiguió también el Premio Extraordinario de la ESO, vive ahora su primer año en Madrid, donde estudia Bioquímica en la Universidad Autónoma. “El cambio ha sido enorme en lo personal porque de golpe he dejado mi casa, mis amigos, y vivo en otra ciudad, pero en los estudios estoy bastante tranquila porque de momento todas las asignaturas me son muy familiares y es como un repaso del año pasado”, describe la joven.

Laura asegura que sus padres fueron los primeros en inculcarle unos hábitos de estudio desde muy pequeña que le han servido para toda la vida. “Mis padres me enseñaron desde niña a que hay que ponerse todos los días un ratito a estudiar y me animaron siempre a sacar el máximo de mí; yo creo que esa es la clave para el éxito académico, aunque también es importante el centro en el que estudias y el mío ha sido muy bueno”, destaca.

Laura compaginaba sus estudios en Vigo con clases de baile, desde el ballet al hip hop. “Ahora me he tenido que adaptar a lo que ofrece el colegio mayor y hago voleibol, que no se me da muy bien pero al menos hago ejercicio”, ríe.

“En nuestra casa siempre hubo muchos libros y nos inculcaron el gusto por la lectura”

Sara Álvarez y Pablo Meijide, campeona nacional de ortografía y ganador de un concurso literario

El Concurso Hispanoamericano de Ortografía, celebrado el pasado noviembre, tuvo un acento totalmente gallego. La pontevedresa Sara Álvarez, alumna del IES Frei Martín Sarmiento, se convirtió en la campeona de España gracias a su control de las palabras y la puntuación.

Sara desmonta otro de los puntos flacos del informe Pisa, el de la lectura. “En mi casa siempre hubo muchos libros; mis padres consideraban que era importante que leyera y me enseñaron a cogerle gusto y eso es lo que me ha dado facilidad para escribir”, relata. La joven, de 17 años, alaba además la buena biblioteca del centro y las actividades que organizan. Estudia francés e italiano y querría trabajar en algo relacionado con la comunicación intercultural.

En su misma clase está Pablo Meijide, que acaba de alzarse como ganador provincial del concurso “Carta a un militar”, del Ministerio de Defensa. “Me gusta mucho escribir, es como mejor me expreso”, confiesa el estudiante, que lee a diario periódicos españoles y extranjeros. Pablo niega que las nuevas tecnologías fomenten la mala escritura entre los jóvenes. “Es cierto que hace años los mensajes de móvil, como se cobraban, se terminaban escribiendo de mala manera, pero actualmente casi todos escribimos con corrección”.

“Nos gustan las matemáticas porque nos las han planteado de forma dinámica y divertida”

IES Alexandre Bóveda, ganadores de varios rallies y olimpiadas matemáticas

Más de quince premios durante los últimos diez años en la Olimpiadas Gallega de Matemáticas, el Rally Matemático europeo y la Semana Matemática de Vigo y otros muchos clasificados entre los 30 mejores de Galicia demuestran que el IES Alexandre Bóveda de Vigo tiene verdadera pasión por los números.

Estos llamativos resultados en la materia en la que precisamente el Informe Pisa es más duro con los alumnos españoles tienen su razón en un esfuerzo especial que realiza el centro educativo vigués para potenciarla. Además de animar cada año a los mejores alumnos a participar en los distintos concursos matemáticos y ayudarles a preparar las pruebas incluso en horas no lectivas, el departamento de matemáticas del instituto realiza desde hace cinco años un concurso interno de problemas y otro de relatos matemáticos y colabora con los colegios que están adscritos a él (Seis do Nadal, Pintor Laxeiro y Balaídos) para fomentar ya desde primaria el gusto por los números. También, a diario, los chavales interesados tienen en el aula virtual problemas para resolver.

“Para que a uno le gusten las matemáticas, hay que plantear la asignatura de una forma dinámica y en este centro nos han preparado para ello”, asegura Jorge Rodríguez, de 17 años, uno de los alumnos que en 3º de la ESO ganó el rally matemático con sus compañeros y que ahora cursa 2º de bachiller. Tanto él como otros de sus compañeros se beneficiaron también de unas clases voluntarias que el centro ofrece para los alumnos a los que les atraen las matemáticas. “No son clases como las obligatorias, sino con problemas de lógicas y cosas divertidas”, añade Helena Suárez, otra de las alumnas.

Los estudiantes aseguran que el elevado número de alumnos por aula en los centros españoles es un problema a la hora de impartir las matemáticas. “Es imposible con 30 o más en clase aprender de una forma amena las matemáticas, yo creo que esa es una de las razones por las que el fracaso es tan alto”, opina Víctor Moreira.

Por su parte, un grupo de ocho alumnos de 2º de la ESO del mismo instituto ganaron este año el Rally Matemático Sin Fronteras y viajaron a Toulousse para representar a Galicia en el campeonato. “El viaje fue genial; el premio nos pagaba el autobús y a través de rifas nos financiamos el resto”, relata Lydia Lorenzo, de 13 años, que asegura que este tipo de competiciones en las que comenzó a participar en 5º de Primaria “te animan mucho a seguir mejorando”.

Su compañero Adrián López, coincide en que esta forma de entender las matemáticas como un juego “ha hecho que cada vez tenga más curiosidad por conocer los resultados de los problemas y me gusta cuando va creciendo la dificultad”, asegura.

“En Matemáticas hay que tener ganas de pensar un poco, no querer estudiar de memoria, pero hay gente que ni siquiera lo intenta”, justifica Antón Sánchez.

“El que se empeña en memorizar y no entender está perdido”

Carlota sánchez Alonso, plata en la Olimpiada de Química

La última Olimpiada Gallega de Química otorgó a la viguesa Carlota Sánchez el segundo puesto, pero esta joven ya había participado en 3º y 4º de la ESO en el campeonato y se había clasificado para la final gallega. “Siempre me gustó la química y se me daba bien; he tenido unos profesores que se implicaban mucho y eso siempre influye”, opina.

Este año dejó su Colegio Miralba y estudia primero de Ingeniería de Minas en la Universidad de Vigo. “Creo que el mayor problema con estas asignaturas de ciencias es que algunos alumnos se empeñan en estudiarlas y no en entenderlas y así es imposible que lleguen a gustarte”, advierte.

Carlota siempre ha compaginado los estudios con el deporte. “Te ayudan a distraerte y eso es importante”, finaliza.