En la tarde de ayer comenzó oficialmente el invierno, hoy se celebra el Sorteo de la Lotería de Navidad y los colegios inician sus vacaciones. Es el pistoletazo de salida para el ocio navideño, en una jornada plagada de festivales de despedida del año en centros escolares y asociaciones y otros actos para poner fin a 2017. Uno de los exponentes de estas vacaciones es una vez más la ferias Nadalocio, que ayer abrió sus puertas en el Recinto Ferial y que tiene a la pista de hielo como uno de sus principales atractivos.
Aunque el Concello anunció su apertura para hoy, en la tarde de ayer ya estaba en funcionamiento, como establece su cartel, que indica que Nadalocio estará abierto hasta el 7 de enero con diversa actividades lúdicas; hinchables, PlayStation, futbolines, karts..., sin olvidarse de la espectacular pista de hielo (obligatorio uso de guantes), que hará las delicias de toda la familia.
El horario del parque durante estos días será de 16.30 a 21.00 horas, y el de la pista de hielo de 16.30 a 23.00 horas. Los días 24 y 31 de diciembre Nadalocio tendrá horarios especiales de 12.00 a 19.00 horas. El precio de la pista de hielo será de 6 euros (1 euro entrada) y el del parque 3 euros (1 euro entrada).
Los centros escolares aprovecharon ayer el último día de clase de este año para celebrar sus festivales navideños, así como diversas asociaciones de la ciudad, como fue el caso de Amencer, con una gala en el Pazo da Cultura. También llegan estos días los conciertos, como el que ofrece mañana la Banda de Salcedo en el mismo escenario.
Por su parte, la Cruz Roja de Pontevedra también ofreció ayer, en su Centro de Día, la gran Fiesta de Navidad dirigida a las personas atendidas desde los proyectos pertenecientes al Programa de Personas Mayores, los usuarios del propio Centro de Día y los niños participantes en las actividades que diariamente realiza la institución.
El objetivo principal era promover la participación en la vida social de los mayores y favorecer el intercambio intergeneracional entre los más pequeños y la tercera edad, además de evitar los sentimientos de soledad durante esta fechas.
Con la ayuda de los voluntarios y el personal técnico se organizó una merienda-baile, e incluso hubo una entrega de regalos por parte de los Reyes Magos, que adelantaron así su visita a la ciudad.
La fiesta culmina el trabajo realizado durante todo el año con el grupo de personas participantes en el Programa de Personas Mayores desde sus diferentes proyectos.
Estas fechas son también propicias para la solidaridad, con campañas para reunir juguetes o alimentos. El Club Audisport-Ibérica de Pontevedra entregó esa semana 305 kilos de comida al comedor de San Francisco y aportó juguetes al parque de Bomberos.
