El Servizo de Cultura e Lingua de la Diputación de Pontevedra concedió al Concello de Marín una subvención de 20.057,93 euros para el proyecto de rehabilitación y señalización del patrimonio histórico cultural en el municipio. En concreto está destinada al proyecto de restauración del Castro de A Subidá. Tras el acuerdo de la xunta de goberno provincial, el Concello de Marín deberá justificar la actuación antes del 30 de junio de 2018.
El Concello de Marín ya ha puesto en marcha la excavación y restauración del Castro da Subidá. El objetivo es intensificar la labor de puesta en valor ya iniciada en este espacio público con un gran atractivo turístico y cultural.
Asentamientos castreños
Marín cuenta con los castros de A Subidá (Sete Espadas, Mogor), Castelo Barbudo (Pardavila, San Xulián), O Castelo (Ardán) y posibles asentamientos castreños en Pedreiras (O Campo), Penizas (Currás), Sobareiro (Loira), y Castro (Seixo). De todos ellos destaca el de A Subidá, que pasa por ser el mejor conservado a pesar de las múltiples agresiones que ha sufrido.
Se trata de un asentamiento castreño bastante romanizado y que se podría situar entre los siglos I al IV d.C, con una economía basada en una fuerte base agrícola y ganadera complementada por la caza, pesca y el marisqueo.
Recientemente Marín ha señalizado el Menhir de Currás para integrarlo en las rutas culturales del patrimonio histórico local. La puesta en valor se realizó gracias a otra subvención que la Diputación de Pontevedra por un importe de unos cuatro mil euros.
Con esta actuación, el gobierno local de Marín se ha propuesto impulsar las potencialidades culturales y turísticas de los yacimientos históricos del municipio. Es el objetivo de un plan que quiere poner en valor el menhir de Currás y también el Castro da Subidá con varias intervenciones.
La Xefatura Territorial de la Consellería de Cultura autorizó la señalización del menhir de Currás que figura en el Inventario de Yacimientos Arqueológicos de la Xunta de Galicia.
En el año 2003 este menhir fue objeto de una intervención arqueológica de excavación de su contorno inmediato, ya que la traza de la variante de Marín (carretera VG 4.4) coincidía con su situación. Finalmente fue trasladado hasta su localización actual, en un lugar próximo al original y del lado de una vía de servicio de la variante, en su margen sur. Ahora se señalizó e instaló información sobre el monumento.
La memoria explicativa de esta intervención indica que la actuación resultaba necesaria para que la interpretación del menhir sea posible para cualquier visitante. Hasta ahora el monumento megalítico no disponía de ningún panel informativo. Este hecho, junto con la singularidad de este elemento patrimonial (único del Morrazo y uno de los pocos existentes en Galicia), avalaron el interés y conveniencia de llevar a cabo esta intervención.
