"A los petroglifos los rodea hoy más maleza que nunca", denuncia Manuel Reboredo Tajes, percepción en la que coinciden otros arqueólogos, historiadores y antropólogos, que advierten de la grave amenaza que suponen los incendios para el arte rupestre. "Supuestamente se firman convenios con las comunidades de montes, pues ya podrían haber pedido un permiso en Cultura, hacer los trámites oportunos que no pasan de un control arqueológico de uno o dos días y limpiar por fin la Eira dos Mouros".

Sorprende "cómo es que gobiernos locales dispuestos a usar cualquier fiestecilla para hacerse una foto desaprovechan las verdaderas potencialidades, a la cabeza el arte rupestre, un gran reclamo de turismo cultural, de naturaleza etc".

Reboredo Tajes destaca que "tenemos unos importantísimos recursos, sobre todo en San Xurxo, Santa María, Viascón, o Carballedo y están totalmente abandonados, sería un enorme atractivo para realizar rutas de senderismo, darse a conocer y hacer actividades, pero la administración es pura desidia".