La iniciativa Xuntos no Camiño completó ayer una nueva etapa, la comprendida entre Pontevedra y el área recreativa de A Barosa, en Barro. Los participantes, unas 80 personas, entre adultos y niños, partieron por la mañana temprano desde Pontevedra, algunos desde el albergue de peregrinos, en el que habían pasado la noche tras terminar el anterior tramo el sábado, procedentes de Redondela.

El reto consiste en llegar a Santiago de Compostela demostrando que ciertas enfermedades crónicas, como la diabetes, el Crohn o la parálisis cerebral, no son un impedimento para culminar aspiraciones vitales como el Camiño de Santiago. Por ello, participan varias asociaciones. La llegada a la capital gallega está prevista para el 25 de marzo.