- Por mi parte sí, por todos los medios, incluso he presentado una propuesta claramente amistosa, en la que proponía adjudicar a los inquilinos el local de hostelería que tenían alquilado y yo, como ganador de la subasta, quedarme con la primera planta y archivo del edificio. Pero no se ha visto en ningún momento ningún tipo de interés hacia esta propuesta, ni siquiera recibí respuesta, con lo que se demuestra que los inquilinos ya no solo querían defender el restaurante que tenían alquilado, si no que van por todo el edificio. Algo inaudito.