Una sentencia del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2 de Pontevedra obliga al Concello de Sanxenxo a pagar a la empresa Perfect Lite SL la cantidad de 15.599,44 euros, más intereses, por la compra de material de limpieza y suministro eléctrico durante los años 2007 y 2008. Se trata de bombillas, tubos fluorescentes, lámparas, tonners y kits de limpieza de ordenadores cuyo precio de coste estaba muy por encima del de mercado, una circunstancia que la empresa justificó con la entrega de regalos, que explicarían la sobrevaloración del material suministrado. De esos "regalos" no hay constancia en el Concello.

Un sistema de venta, el telefónico con regalos promocionales, que según recoge la sentencia es legal y se instauró en el Concello de Sanxenxo en el año 2002, fecha en la que Perfect Lite SL establece su relación comercial con la administración local sanxenxina.

Desde el año 2002 hasta el 2007 Perfect Lite SL factura a Sanxenxo más de 11.000 euros anuales y cobra puntualmente. La controversia surge en 2007, cuando el entonces concejal de Servicios compra una serie de material por el que la empresa emite seis facturas. Las tres primeras fueron abonadas y otras tres quedan pendientes de pago.

En mayo de 2008 se realiza otra compra que genera otras tres facturas, que tampoco atiende el Concello. En septiembre de ese mismo año se repite el pedido, por el que se emiten otras tres facturas pendientes de pago. En total el Concello acumula 15.599,44 euros de deuda con Perfect Lite SL.

Desde entonces la empresa reclamó el pago en diversas ocasiones y en el año 2012 el Concello inicia un expediente de reconocimiento extrajudicial de una deuda de 2008. Recoge la jueza en su sentencia el hecho de que la administración tardase tres años en resolver este expediente para decidir que parte de la mercancía la devolvería y otra parte la abonaría al precio que consideraba de mercado.

Cabe resaltar, según la documentación que consta en el expediente, que el precio de mercado en los tubos fluorescentes oscilan, según la potencia, entre 2,25 y 2,53 euros y la empresa los factura a 151,20 y 240 euros cada unidad.

Y es que en esta cuestión, el Gobierno local anterior sostuvo que los pedidos fueron servidos sin ser contratados. Sin embargo, consumió parte del material.

Por ello, y tras la interposición de Perfect Lite SL de un contencioso administrativo contra el Concello, la sentencia considera probada "la relación comercial entre las partes y que los suministros, aún sin contrato cumpliendo las formalidades legales que le son exigibles a la administración pública, se realizaron y, o fueron aprovechados por la parte demandada, o los tuvieron a su disposición para el aprovechamiento correspondiente, no pudiendo achacarse a la demandante la falta de diligencia del comprador, ya sea en la cantidad adquirida o en el precio comprometido".