| Como cada año, la virgen del Carmen fue homenajeada ayer en Combarro, tierra de marineros y a los que la santa protege. La imagen de la virgen salió de la iglesia de San Roque y recorrió las calles del conjunto histórico para encontrarse en el exterior del templo con sus fieles. Se trata de uno de los actos religiosos más importantes del verano en la parroquia poiense, una tierra fuertemente vinculada al sector marítimo. Como es tradición, la Virgen del Carmen viajó en barco por la ría acompañada de los marineros. La embarcación con la imagen dio una vuelta alrededor de la isla de Tambo, un recorrido que siguieron el resto de barcos. Las flores, las banderas y las hojas de palmera volvieron a lucir la celebración religiosa. Al terminar el viaje en barco, fue devuelta a su lugar original, la capilla de San Roque, en el corazón de la zona monumental de Combarro. El acto fue seguido tanto por los fieles como por los numerosos turistas que durante estos meses de verano visitan las Rías Baixas, y, especialmente, la joya histórica de Combarro, donde sus estrechas calles y sus numerosos hórreos llaman la atención y son el telón de fondo perfecto para las fotografías de los viajeros.