"La gente empieza a ver otras formas de hacer política y eso se ha consolidado en estas elecciones generales", entiende el portavoz municipal de Marea, Luis Rei. El 20-D ha supuesto, para Rei, un nuevo y claro aviso de lo que puede suceder en el año 2016 en las elecciones autonómicas, que "van a representar el cambio de políticas en la Xunta de Galicia".
En clave local, Marea de Pontevedra atribuye parte del mérito del crecimiento experimentado por las Mareas, al trabajo realizado por la agrupación municipal en el Concello. Este trabajo "está llegando cada vez a más gente en Pontevedra, que ve que somos realmente la alternativa, y el resultado de las elecciones, aunque no son exactamente extrapolables a las autonómicas ni a las municipales, en parte suponen la consolidación de un proyecto que no era para un mes ni era un proyecto de paso, sino que es un proyecto para quedarse y para ayudar a cambiar las cosas", subrayó Luis Rei.
En adelante, si bien la actuación de Marea de Pontevedra se verá lógicamente condicionada a la composición actual do Concello, "que permite los juegos de mayorías y minorías que hay" -como apunta Rei-, la agrupación urge en todo caso que "deben cambiar las reglas de juego en el Concello, en alusión a la propuesta de crear una mesa por la regeneración democrática en el ayuntamiento, propuesta por Marea tras la aprobación del último presupuesto municipal por parte de un BNG en minoría, aprovechando una baja médica de un concejal del PP. "Creemos que en la situación actual, en la que la estructura a todos los niveles del Concello favorece únicamente al grupo de gobierno, no es sostenible y no respeta la voluntad democrática", indica Rei.
