La Dirección General de Tráfico, el Concello de Pontevedra (a través de la Policía Local) y la Universidad de Vigo han sumado esfuerzos para poner en marcha una nueva campaña de seguridad vial que tiene como principales destinatarios a la población universitaria. En la presentación de esta iniciativa, "Cero Violencia Viaria", la jefa provincial de Tráfico, Isabel Alonso de Linaje, hizo hincapié en la preocupación existente en la DGT por el incremento de los descuidos al volante por la utilización de dispositivos relacionados a las nuevas tecnologías, especialmente por el uso de los "smartphones" y sobre todo algunas de sus aplicaciones como es el caso de la mensajería a través del "whatsapp".
La jefa provincial de Tráfico señaló que esta preocupación ha llevado a la DGT a poner en marcha campañas específicas de vigilancia y concienciación para hacer ver como el uso de estos dispositivos "interfiere en la conducción de manera realmente grave" y considera que la iniciativa que pone en marcha el Concello de Pontevedra, la Universidad y la propia Jefatura Provincial es una oportunidad de oro para continuar con esta labor de sensibilización sobre todo porque va enfocado a un sector de la población como son los jóvenes entre los que existen numerosos usuarios de estos dispositivos tecnológicos.
Alonso de Linaje destacó la importancia de aumentar la concienciación en materia de seguridad vial entre un sector de la población que, por su edad, se está iniciando en la conducción o espera hacerlo en un plazo de corto relativamente breve y que tiene también sus propias particularidades como puede ser la "inexperiencia", la "impulsividad" de la juventud o la "apreciación atenuada del riesgo". El pasado año en España fallecieron 138 jóvenes de entre 15 y 24 años en accidente de tráfico, un 9% del total de las víctimas. En lo que va de año se perdieron cinco vidas de personas con estas edades tan tempranas en las carreteras de la provincia de Pontevedra: eran el conductor de un turismo, tres pasajeros y un motorista. De ahí la necesidad de llegar también a este sector de la población. No obstante, la jefa de Tráfico abogó por afrontar esta concienciación pero no hacerlo de una forma "alarmista" puesto que "tampoco es deseable acercarse a la conducción desde el miedo". "La conducción requiere poner en práctica valores como la solidaridad y el respeto", añadió.
Alcohol y drogas
La jefa de Tráfico destacó también que el ocio de los jóvenes en ocasiones se mueve en ambientes propicios a la ingesta de alcohol u otras sustancias por lo que no está de más volver a insistir en su incompatibilidad con la conducción. Con todo, recalcó que los porcentajes más elevados de positivos por alcohol no se dan entre estos conductores más jóvenes, sino a edades más elevadas (concretamente entre los 25 y los 34 años). "Cada vez es más frecuente encontrarse entre los más jóvenes con la figura del conductor alternativo", explicó Isabel Alonso.
El intendente principal de la Policía Local, Daniel Macenlle, coincidió al señalar que "era hora de tocar un sector vulnerable" en materia de seguridad vial como es el universitario y remarcó que, aunque en el casco urbano de Pontevedra "llevamos varios años sin ningún fallecido lo que pretendemos es extender este modelo urbano y promocionar las buenas prácticas al volante a otros niveles". Así, la seguridad vial se afronta desde diversas perspectivas, la del conductor, la del peatón o la del ciclista; además de analizar, por ejemplo, las consecuencias y secuelas de los accidentes de tráfico. Incluso se realizará un simulacro de accidente múltiple para testar la capacidad de respuesta de los servicios de emergencia ante un siniestro de estas características.
La Universidad no solo aporta las instalaciones, sino que investigadores que están realizando trabajos en estos momentos en materia de seguridad vial participarán en los debates y mesas redondas.
El alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, calificó la iniciativa de "novedosa e interesante" y explicó que aunque el Concello de Pontevedra viene adoptando medidas desde el punto de vista urbanístico o del calmado de tráfico que permitieron reducir drásticamente el número de siniestros, la reeducación vial es la vía "fundamental" para lograr el complicado objetivo de "cero fallecidos".
