La Brilat reitera su vocación de permanencia en Pontevedra pero, por primera vez, reconoce la posibilidad de estudiar el pago de un canon anual por los terrenos que sean reconocidos como propiedad comunal. Los responsables de la base militar apuntaron esta opción como una de las que tiene más posibilidades de materializarse y lo hicieron en un encuentro con los responsables de los montes de Salcedo, Figueirido y Vilaboa. Militares y vecinos destacaron que la cita sirvió para "unificar criterios" en cuanto a la convivencia de futuro. Estos últimos calificaron el de ayer como un día "histórico" por los avances que supone en este largo conflicto.

El principal progreso es algo que coincide con las máximas que desde los colectivos de gestión del monte llevan años argumentando, exigiendo la titularidad de las tierras pero sin que ello signifique la expulsión del recinto castrense. Así, desde los altos mandos se matizó que se enviará a Defensa un informe y que a continuación se podría poner en marcha una comisión bilateral para negociar con los comuneros el pago de un canon anual por los terrenos que sean reconocidos como de titularidad comunal. Tanto las asociaciones como desde el Ejército se ha insistido en el objetivo de que este cuartel seguirá instalado en Pontevedra, acallando así hipótesis sobre un posible traslado o cierre a causa de los litigios terrenales o propias cábalas del Gobierno central sobre el desmantelamiento de alguna de sus bases.

Si bien el general Alonso Miranda no realizó valoraciones sobre el encuentro, desde la Brilat sí se catalogaron las conversaciones con los representantes de las comunidades de montes como "fructíferas y cordiales" dado que sirvieron para llegaron a puntos comunes sobre las "necesidades mínimas" en cuanto a disponibilidad de superficie. "Lo que queremos tanto nosotros como ellos -en referencia a los comuneros- es que la Brilat se quede en Pontevedra, no hay ninguna intención de que salga porque está muy arraigada a la vida social, económica y cultural de la comarca", se indicaba ayer desde la brigada. Asimismo, se reconocía que se barajaba la opción de abonar un canon anual o alquiler por las hectáreas que sean de dominio vecinal, pero al mismo tiempo recordó que "en todo caso quien decidirá sobre estas negociaciones será Defensa", que "tiene la última palabra".

Por su parte, desde las comunidades de montes también se realizó una lectura positiva. El presidente de la asociación de Salcedo, Fernando Pintos, tildó como "histórica" la reunión porque "después de tantos años de conflicto, éste podría quedar liquidado en un breve plazo". Así, puntualizó que los responsables castrenses hablaron de "un canon tipo alquiler", pero que esta fórmula tendrá que ser aprobada por las instancias superiores del ministerio. Además, dijo que "se quiere poner fin a la incertidumbre sobre la base", algo sobre lo que recalcó que "las comunidades de montes nunca deseamos que se fuese". Pintos, si bien aclara que es una "percepción personal", calcula que si todo va bien el reconocimiento de la propiedad vecinal y la concreción de ese pago podrían quedar resueltos "a mediados del año que viene".

Desde las otras dos comunidades de montes también mostraron su satisfacción por lo hablado ayer. Así, el representante de Figueirido, Carlos Boullosa, valoró que se abordase "una vía de encuentro" y que todo transcurriese en "buena sintonía con la Brilat". De todas maneras, recordó que será Defensa la que tenga que dar el visto bueno a los puntos de acuerdo. El tesorero de los comuneros de Vilaboa, José Luis López, acudió ante la indisposición de Xabier Míguez, que evoluciona en el Hospital Xeral tras su accidente en bicicleta del pasado septiembre. Incidió en que la llegada a buen puerto pasa por concretar ese canon y que la comunidad que representa "nunca será impedimento para que la Brilat siga en su sitio".