Llega a la secretaría general del partido con la legitimidad que le otorga el 64,9% de los votos del congreso que ayer se celebró en Pontevedra y con la mano tendida a sus adversarios, con los que asegura que contará para alcanzar el objetivo que comparten más allá de cualquier diferencia y que no es otro que combatir al PP y desalojarlo del poder.

– Respaldado por una amplia mayoría del congreso, ¿qué primer mensaje transmitiría a los que le apoyaron y cual a quienes fueron sus adversarios, habida cuenta de la dura intervención de su adversario, Juan Manuel Rey?

– A los que nos apoyaron en un proyecto integrador, municipalista, un proyecto donde cabemos todos y todos somos necesarios para sacar este partido adelante les diría que nuestro compromiso es seguir trabajando, codo a codo con ellos. A Juan Manuel y a la parte que representaba pues evidentemente no compartimos su discurso, lo respetamos pero no lo compartimos. Juan Manuel es capaz de tener un discurso más político, más de candidato, no tan ácido como el que hoy hizo. Creo que se equivocó.

– El alcalde de Caldas reivindicó la voz de los concellos pequeños y alertó del peligro de consolidar una provincia fragmentada.

– Hay diferencias entre los ayuntamientos en función de la población, de su situación, de si gobernamos o no y evidentemente nuestras agrupaciones no son iguales. Creemos que el congreso ha hecho un buen trabajo para dinamizar estas agrupaciones y en mi discurso dije que es dentro de esa diversidad, que reconocemos en el territorio y también en las distintas sensibilidades, donde debemos poner un proyecto para todos, en el que cabemos todos.

– Sus primera palabras fueron para decir "cuento con todos vosotros", pero el sector minoritario no entra en la nueva ejecutiva provincial.

– Juan Manuel han hecho un ofrecimiento a seguir trabajando a partir de ya y nosotros lo recogemos pero en cuanto a que estén en la comisión ejecutiva ni nos lo han planteado ni suele ser así. Hay integración cuando queda un candidato, si hay dos, como es el caso, el ganador elabora su ejecutiva. Nosotros vamos a contar con ese 30% crítico para seguir trabajando y hacer un proyecto atractivo para los ciudadanos de Pontevedra , muchos de los cuales están pasando momentos difíciles: por el desempleo, los recortes en educación y sanidad y el proyecto del PSOE es el que tratará de resolver estos problemas.

– Unos y otros han declarado que el enemigo a combatir es el Partido Popular ¿qué papel puede jugar en este objetivo su condición de portavoz del grupo socialista en la Diputación?

– La política está ahora muy desacreditada precisamente por la actuación del Partido Popular, tanto en el Estado como aquí en Galicia, en donde los tres años de gobierno de Núñez Feijóo sumaron 65.000 desempleados, más de 25.000 en nuestra provincia, lo que da medida de que sus políticas a pesar de que en campaña decían otra cosa no dan resultado. Al contrario hemos ido a peor en la situación económica y en el empleo. La Diputación es un chiringuito del PP, clientelar, y que desde luego no obedece a la transparencia que debe tener una institución y tampoco es una administración que esté dando los servicios que tendría que dar a los ayuntamientos en función de sus necesidades y no mirando el color político. Nosotros queremos recobrar el valor de la política y ser capaces de armar un partido que conecte con los ciudadanos, que conecte con sus aliados naturales: los sindicatos, asociaciones y colectivos sociales que son los que tienen el pulso de la calle y así construir con ellos el proyecto alternativo al PP.

– Señaló en su discurso que las decisiones de la provincia de Pontevedra se tomarán en la provincia y no en Santiago ¿es un aviso a navegantes? ¿una advertencia a la ejecutiva gallega?

– Es un mensaje de responsabilidad que quería transmitir a la comisión ejecutiva pero también a las distintas agrupaciones de Pontevedra. Si nosotros vamos a ser responsables de los resultados obtenidos en las elecciones autonómicas y en las municipales pues tendremos que tener la responsabilidad de elaborar las candidaturas electorales y por lo tanto lo que queremos es tener autonomía para poder ejercer esa responsabilidad en toda su extensión. Santiago tomará las resoluciones que sus estatutos le permiten y las decisiones de la provincia las tomaremos en la provincia, sin injerencias y sin enfrentamientos. Recientemente se ha celebrado un congreso gallego, ha salido elegida una ejecutiva y para ella nuestro respeto y nuestra lealtad y nuestra buena disposición para trabajar con ella. Pero nosotros queremos que nuestro espacio lo podamos gobernar y dirigir nosotros tal como regula los estatutos.

– En pocos meses se convocarán elecciones autonómicas ¿está preparado el PSdeG-PSOE àra dar el salto a la Xunta?

– Sí. Este proceso congresual nos ha permitido contactar con mucha gente, de todas las agrupaciones, en sus territorios, hablar y pulsar la realidad. También sirvió para dinamizar el partido, para mover a sus bases y estamos perfectamente preparados con equipos, con proyecto y con discurso para ayudar a ganar las elecciones autonómicas al PSdeG-PSOE.

– En este proceso congresual se le ha identificado como el hombre de Abel Caballero ¿siente que su sombra es alargada?, ¿se siente tutelado?

– No hay tutela de ningún tipo. Es una realidad que yo soy concejal, miembro de un equipo que gobierna el Concello de Vigo y cuyo alcalde es Abel Caballero. Dicho esto creo que el suyo es un proyecto exitoso que se puede exportar a toda la provincia. El Partido Socialista subió seis mil votos en las últimas elecciones municipales y fue capaz de incrementar en dos el número de concejales, un logro que es fruto de Abel Caballero, de su política municipalista que fue capaz de conectar con los ciudadanos de Vigo y eso a pesar de toda esa enorme ola que venía en contra del Partido Socialista. Lo que queremos, Abel Caballero y yo, como secretario general, es trasladar ese modelo al resto de agrupaciones y ayuntamientos de la provincia para también gobernar ahí.

– Habla de exportar un modelo que ha triunfado en Vigo, la ciudad más grande de Galicia, una urbe industrial pero el resto de la provincia no tiene este perfil.

– Reitero que el de Vigo es un modelo exportable que obviamente tendrá que ir adaptándose a las distintas sensibilidades que hay en el partido, a los distintos territorios que conforman la provincia pues, como no puede ser de otra manera, también reconocemos que Pontevedra no es un todo homogéneo. Pero el modelo municipalista de Caballero es un modelo útil.

– ¿Cree que se ha utilizado su sintonía con el alcalde de Vigo como arma arrojadiza en el proceso congresual?

– Yo creo que han intentado usar esta sintonía con Caballero para desacreditarme pero sinceramente creo que es un valor positivo ser de una agrupación que sube en votos, que sube en concejales y que tiene un alcalde que conecta con los ciudadanos.