Una denuncia vecinal permitió a la Policía Nacional de Pontevedra erradicar un punto negro de venta de droga al menudeo con la particularidad de que, en esta ocasión, los dos detenidos, ambos menores de edad, trapicheaban con la sustancia estupefaciente en un punto tan sensible como es la zona de entrada y salida de un instituto de secundaria, concretamente el Sánchez Cantón.

Los dos detenidos, que ya se encuentran bajo la tutela de sus progenitores, deberán comparecer ante la Fiscalía de Menores de la Audiencia Provincial de Pontevedra en cuanto sean requeridos para ello. Ambos tienen antecedentes, pero no por venta de estupefacientes sino por delitos contra el patrimonio.

Los hechos se remontan a las 14.35 horas del pasado martes, cuando en la sala del 091 se recibió una llamada telefónica en la que se alertaba de que dos jóvenes, de los cuales se aportaba unas concretas características físicas y de vestimenta, se encontraban "trapicheando" con droga que supuestamente vendían a los alumnos que salían de este instituto situado en la avenida Reina Victoria.

Hasta el lugar se desplazaron de inmediato varias dotaciones del Cuerpo Nacional de Policía que desplegaron el oportuno dispositivo policial y que desembocó en la localización de dos adolescentes cuya descripción física coincidía con la aportada por el alertante. Cuando los agentes se acercaron para identificarlos, uno de ellos intentó deshacerse de una bolsa que contenía pequeñas cantidades de hachís y marihuana escondiéndola en una cabina telefónica. En el posterior cacheo que practicaron a ambos detenidos se les intervino, a mayores, 51 pequeñas bolsas de autocierre de las utilizadas para la preparación de pequeñas dosis de marihuana, un cúter supuestamente utilizado para el corte del hachís en dosis y una báscula de precisión.

Los agentes procedieron a su detención y traslado a la Comisaría. En total la droga intervenida ascendía a 16 gramos de hachís en pequeños trozos y 20 de marihuana repartidos en ocho bolsitas listas para su entrega a otros consumidores, según informa la Policía Nacional.

La intervención se enmarca dentro del Plan de Prevención y Represión del Tráfico Minorista de Sustancias Estupefacientes que desarrolla la Policía Nacional en las proximidades de los centros escolares.