Centroamérica y el Caribe, una escena artística compleja, atomizada, desconocida más allá del tópico turístico y fuertemente vinculada a Galicia, será la protagonista de la Bienal de Pontevedra 2010. Esta cita con el arte contemporáneo internacional se celebrará a partir del próximo mes de junio, estrena comisariado, ubicación dentro de la misma ciudad del Lérez y en su nueva edición se extenderá por primera vez a Vigo y Vilagarcía.
Las migraciones, las historias políticas de cada país y como han sido traducidas por los artistas o una reflexión social a través del video documental y la fotografía serán algunas de las propuestas de esta cita artística que será presentada oficialmente el próximo mes de febrero en la feria Arco.
El crítico de arte, ensayista y comisario de exposiciones Santiago B. Olmo (Madrid-1958), un reconocido especialista en el arte contemporáneo latinoamericano, ha sido designado para encabezar esta "nueva" Bienal que "debe recuperar o máximo nivel de esplendor, necesitaba un novo impulso cunha nova persoa", según explicó Rafael Louzán, presidente de la Diputación, institución que promueve la Bienal.
Ésta tendrá su sede central en el nuevo edificio del Museo de Pontevedra, 10.000 metros cuadrados donde por primera vez se exhibirá el grueso de las exposiciones, que en ediciones anteriores se repartían en distintos espacios de la ciudad.
Por su parte, el edificio Casto Monteagudo del Museo Provincial acogerá una intervención artística y como complemento del programa expositivo se organizarán otras actividades como mesas redondas, proyecciones etc.
Vigo y Vilagarcía serán en esta nueva edición subsedes con dos exposiciones que buscan extender la Bienal "a toda a provincia", en palabras de Rafael Louzán. Éste precisó que en la Estación Marítima de la ciudad olívica se presentará al público la muestra dedicada a las migraciones, precisamente por tratarse del punto "no que centos de galegos iniciaron a súa viaxe a Centroamérica".
Por lo que respecta a los soportes teóricos de la exposición, el nuevo comisario explicó que varias ideas atravesarán todo el programa de la Bienal, a la cabeza la relación de Galicia con la gran región de Centroamérica y el Caribe, pero también preocupaciones comunes a las escenas artísticas de estos países (desde Aruba a Belice o Guatemala) como la desigualdad, el drama de las maras, la violencia y en general la vida cotidiana; la performance como vehículo expresivo o la idea de ciudad, centrado inicialmente en la ciudad de La Habana, uno de los grandes leif motiv de documentalistas y fotógrafos que han retratado los espacios urbanos.
"Queremos que la Bienal sea un medio de aproximación a estas relaciones sociales y culturales", señaló el nuevo comisario de la macroexposición. Ésta se propone de partida un reto ambicioso: mostrar en un mismo proyecto escenas artísticas dispersas geográficamente y muy diversas, como el mismo Caribe que baña regiones hispanas, anglófonas o de influencia holandesa.
